Periquillo Sarniento. “El Periquillo Sarniento”

        La finalidad de este escrito es hablar acerca de los primeros 15 capítulos de la novela picaresca denominada  “El Periquillo Sarniento”, obra magna perteneciente a José Joaquín Fernández de Lizardi. Será preciso mencionar que la obra pertenece al movimiento literario neoclásico, cuya principal característica es la finalidad didáctica, motivo por el cual, se usa un lenguaje claro y simplificado para enseñar al lector a practicar virtudes.

          En la magna obra de Lizardi, Pedro Sarmiento manifiesta que la finalidad por la cual escribe su vida, es para enseñar a sus hijos todas aquellas acciones inadecuadas, y así lograr que las eviten y tengan una vida virtuosa. De igual forma, expresa la opinión que tiene respecto de la educación recibida en su infancia por parte de sus padres; Pedro presenta una constante queja hacia su madre por el abandono y mala educación recibida de su parte.

        Posteriormente, se enuncia la educación académica inicial de Sarmiento, impartida por un profesor virtuoso, pero carente de disposición y conocimiento, motivo por el cual, un sacerdote le obliga a cerrar su institución. Con respecto a lo acaecido, Pedro recibe educación con un nuevo profesor, el cual describe como un hombre con conocimientos y virtud, sin embargo, muy serio y rígido. Su madre hace lo posible para encargar la educación de su hijo a un sacerdote, con el cual aprende del buen ejemplo. Al terminar su adiestramiento con el jefe religioso, su padre manifiesta la necesidad de que su hijo aprenda algún oficio para subsistir en la vida; empero, su madre declara que su hijo pertenece a la nobleza, fundamento por el cual, no puede aprender un oficio mecánico. La madre, haciendo uso del llanto, convence a su esposo para que Pedro, su hijo, continuara con sus estudios académicos. De esta forma, se instruye al protagonista en el ámbito de la gramática y de la filosofía; así como en la física.

Al terminar los estudios mencionados, se dispone enviar a Pedro a una hacienda en España. En esta conoce a un padre vicario, personaje relevante que enseña a Sarmiento la virtud de callar cuando no se sabe de lo que se habla y le inculca en Pedro el interés por saber más de la física. En esta hacienda, Sarmiento conoce la corrida de toros muy particular en España, y se reencuentra con su amigo Januario, el cual, se encarga de avergonzarlo durante su estancia. Al regreso de Pedro a casa de sus padres (a causa de un engaño por parte de su amigo Januario), su padre le exhorta a pensar en un oficio a desempeñar. Después de pedir la opinión de Pelayo, uno de sus amigos de infancia, Pedro decide dedicarse al sacerdocio.

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