SINTESIS DE TRIFTOFANITO EN LA CELULA
20 de Mayo de 2013
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PROLOGO.
Este libro comienza hablando sobre los diversos lugares en donde una maravillosa historia se desarrolla, ya sea en lugares imaginarios, lugares reales, lugares reales y fantasticos a la vez, ficticios, etc.
Este cuento que es un historia maravillosa se desarrola precisamente en un lugar fantastico nadamas y nadamenos que en el cuerpo humano, existen justo dentro de nosotros las cosas mas maravillosas de esta tierra si no es que en mi opinion las mas bonitas y hermosas del mundo, algo que no solo es imaginacion del autor, es una hermosa realidad.
como cada organizacion, reino etc. el cuerpo tiene su propia forma y manera de organizarse, asi como las abejitas y las hormigas que se supone es la organizaicon mas perfecta, nada como la del cuerpo humano, comienza narrando que existen diferentes condados que cumplen diferentes misiones. en cada uno habitan infinidad de diiminutos seres, estos se llaman celulas que sin poder descanzar trabajan para conservar el cuerpo humano y su explendor.
Uno de estos condados es el cerebro, en este se realizan las funciones mas improtantes, aqui se desarrolla el cuento , este es el hogar de triftofanito y lisina los 2 aminoacidos que se dieron en el cuento anterior despues de emprender un gran largo viaje por todo el cuerpo. en esa travesia conocieron inumerables misterios, pero ninguno les parecio tan sorprendente como los del cerebro. por eso decidieron quedarse alli y colaborar en la mision de tan importante organo.
.. Un dia mientras paseaban triftofanito y lisina por la gran cordillera de la corteza cerebral, lisina cayo en la cuenta de alg importante.
Comienza triftofanito diciendo."hoy hace un mes que comenzo nuestro maravilloso viaje , al escuchar las palabras de lisina triftofanito se detuvo. su cuerpo se lleno de emocion y en un instante cientos de imagenes acudieron a su memoria. recordo el tiempo en que lisina el y otros aminoacidos vivian en el interior de un huevo de gallina, en una granja. vio de pronto, como en una gran pantalla, el momento preciso en que todos juntos ingresaron al cuerpo por el condado de la boca.
Revivio tambien los viajes a ravez de la sangre, la llegada a la piel y los peligros afrontados en diversos condados. finalmente recordo la declaracion de amor que le hizo a lisina y el beso que ella le dio al aceptar vivir con el en el cerebro.
Absorto en sus pensamientos, triftofanito quedó en silencio. Lisina percibió el como su buen amigo triftofanito había caído en sus propios pensamientos y, tomándolo del brazo, le dijo:
Sí querido. Hoy hace un mes que el granjero se comió el huevo en el que vivíamos. -¿ Un mes solamente? ,preguntó son tantas las cosas que nos han sucedido ... Lisina se sentó sobre el piso, justo alIado de un arroyo· de transparente líquido quecorría por allí.
Mientras mojaba su mano y miraba a lo lejos, la aminoácido preguntó..¿ Cómo estarán Aspartito, Glutamito y todos los demás aminoácidos que entraron con nosotros al cuerpo?, A veces lamento que se hayan quedado a vivir en otros condados. Triptofanito respondió: Los aminoácidos debemos colaborar en la misión del cuerpo humano. Es nuestro destino y podemos alegrarnos de ello. Sin embargo, por más lejos que estemos unos de otros, nunca dejaremos de ser una gran familia., le dijo triftofanito a lisina ,,,¡La familia Proteína! exclamó Lisina, reanimada. La hermosa aminoácido sacó del agua una molécula reluciente que pasaba por allí y, sosteniéndola entre sus dedos, dijo sonriendo: ¡Seguro que son tan dichosos como lo somos tú y yo en el cerebro! Triptofanito se sentó a un lado de Lisina y la tomó de la mano. ¿Sabes, Lis? .. con un tonito bonito le dijo el enamorado triftofanito a lisina ..... Mientras vivíamos dentro del huevo, en familia, siempre estaba yo inquieto pues anhelaba emprender un viaje por el cuerpo humano.
Ahora que hemos podido realizado, estoy satisfecho. Sé que al fin conocemos los misterios de este maravilloso reino, . . Apenas dijo estas palabras, el suelo debajo de ellos se sacudió. Triptofanitoy Lisina estaban acostumbrados a que este tipo de cosas sucedieran. Así pues, decidieron esperar a que el piso dejara de temblar. Pero la sacudida se hizo más fuerte. Al cabo de unos segundos, Triptofanito y Lisina comenzaron a preocuparse, pues el temblor no daba muestras de detenerse.
Los aminoácidos creyeron conveniente alejarse de aquel lugar, pero apenas se habían puesto de pie, un estremecimiento· mayor abrió en el suelo una enorme grieta por la que cayeron rodando. No descendieron mucho. Al detenerse advirtieron con gusto que el temblor había pasado. Se hallaban en el fondo de una caverna. Triptofanito supuso que no había nada que temer. Simplemente tendrían que encontrar la forma de salir de allí.
El cuerpo humano es un ser vivo -le dijo a Lisina-. Uno no puede habitar aquí sin esperar que tales cosas ocurran. Es parte de lo maravilloso de este reino. Te insisto en que conozco bien sus misterios. Cuando terminó de hablar, el suelo volvió a estremecerse. Ahora la sacudida fue mucho más fuerte. Los aminoácidos se abrazaron.
Las paredes de la caverna se les venían encima y amenazaban con aplastados. Antes de que eso ocurriera, el piso se abrió una vez más y Triptofanito y Lisina fueron a dar a una caverna todavía más profunda. Triptofanito comenzó a ponerse nervioso. No obstante, decidió disimular su inquietud. -No hay nada que temer, querida mía -dijo-o Simplemente estamos más abajo que antes.
Pero quiero repetirte que conozco el cuerpo humano como la palma de mi manotriptofanito volviendo en si le dijo a lisina que podia apostar en ya que habia conocidos todos los secretos del ser humano, lo describe el libro como con un tono de superioridad al decir que ya no tenia nadamas que conocer pues el ya lo sabia todo, depronto Un nuevo temblor abrió una tercera grieta y por ella se fueron rodando él y su compañera. Un tramo más abajo volvieron a detenerse. Triptofanito iba a comentar algo, pero Lisina puso un dedo sobre los labios de su amigo, y le dijo: -N o digas nada, querido Trip. N o sé por qué pero, cada vez que hablas, el piso se sacude a nuestros pies. Creo que alguien no está de acuerdo con tus palabras. -Sólo dije que conozco los miste ...
La caverna en que habían caído comenzó a estremecerse. Pero Triptofanito guardó silencio y el temblor pasó. -¿Lo ves? Es mejor que no hables más hasta que sepamos de qué se trata. La cueva era oscura. Un pesado silencio rodeaba a los aminoácidos. En eso, un rincón del negro espacio se iluminó. Alguien había encendidc una luz. La diminuta y móvil llama creció hasta convertirse en una centelleante red de chispas que llenaron la caverna con su resplandor. Entonces, iluminado por tal
destello, pudo admirarse el cuerpo de un extraño ser que parecía dormitar sentado. De su enorme cabeza brotaban todas aquellas chispas. Triptofanito se acercó. El ser iluminado abrió los ojos y levantó la cabeza para decir con voz suave y firme: -Lisina tiene razón, querido Triptofanito. Los he hecho bajar hasta aquí para sacarte de tu error. Dices que conoces los misterios del cuerpo humano. Escúchame bien; es cierto que entiendes algunos de ellos ... pero no los más profundos.
Triptofanito se quedó asombrado al escuchar aquellas palabras. ¿Cuáles eran esos misterios que él desconocía? El extraño personaje siguió hablando. -Ustedes han recorrido el cuerpo,conocen sus condados.
Saben que allí viven miles de seres prodigiosos. Convivieron con ellos y se hicieron sus amigos, sin darse cuenta de que tales seres guardan en su interior grandes secretos. Triptofanito sacudió la cabeza asombrado, y dijo: ¿ Quieres decir que dentro de los habitantes del cuerpo ocurren cosas desconocidas para nosotros? El resplandeciente ser contestó: Su vida interna es un espacio prodigioso. Sólo conociéndolo podrás decir que estás al tanto de lo que ocurre en el cuerpo humano. De un salto, Triptofanito se colocó a un lado del iluminado maestro y lo abrazó con fuerza. El cuerpo del aminoácido se llenó de luz. -Por favor, muéstranos cómo podemos entrar allí -dijo, sin soltar a su nuevo amigo Queremos conocer ese lugar del que hablas. ¿No es así, Lisina? ¿Verdad que queremos viajar a ese sitio? Lisina sonrió al ver los pies de Triptofanito, que se movían de un lado a otro con gran inquietud.
Entonces dio unos pasos para acercarse a él. Rodeó con sus brazos la cintura del aminoácido y, llena también ella de luz, dijo con ternura: -Sí, querido, no hay nada que anhelemos más en el mundo.
UN NUEVO VIAJE DA INICIO
Un nuevo viaje, Triptofanito Emocionado por la idea de comenzar preguntó: -¿Dónde podemos encontrar uno de esos seres maravillosos del cuerpo humano? -¿Una célula? -respondió el ser iluminado. -¿Así se llaman? ¿Células? -preguntó Triptofanito, y volvió a indagar con entusiasmo ¿Dónde podemos encontrar una de ellas? No hay que ir muy lejos.
Tienen una delante de ustedes. Triptofanito volteó hacia todos lados. Rodeó al ser luminoso y buscó entre los vericuetos de aquel rincón. Pero Lisina creyó comprender las palabras de su radiante amigo y preguntó: ¿Tú eres una célula? Triptofanito detuvo la búsqueda y, asombrado, volvió al sitio en el que estaba antes. Sí, lo soy. Mi nombre es Neurona. Las neuronas somos células que conformamos el sistema nervioso.
Hay de otros tipos: células que defienden al cuerpo, células que acarrean oxígeno, células que permiten ver los colores de las cosas, en fin, no puedo mencionadas a todas, pues, aunque sólo contara las del cuerpo humano, tardaría demasiado tiempo. Triptofanito se llevó un dedo a la frente y se rascó. Era un gesto que repetía cada vez
...