Dead Poets Society

La sociedad de los poetas muertos.

Esta película se desenvuelve en medio de un ambiente de tensión y tristeza, pero en cada pequeño detalle se demuestra la tendencia a tratar sobre el arte y la felicidad del mundo, de la manera de ver la belleza de la vida y de vivir intensamente todos y cada momento en ella.

Se trata de un grupo de estudiantes que, motivados por un profesor (Keating), comienzan a formar sesiones secretas para compartir interminables recitaciones y declamaciones de poesía y literatura. El profesor Keating, un librepensador, motiva a los estudiantes a perseguir sus sueños, a vivir dignamente la vida, a saborearla y vivirla intensamente, a querer la poesía y hacer de ella una forma de vida. A pesar de que el retrógrada sistema escolar se impone a sus ideales y a su intención, el profesor Keating logra despertar en su grupo un vínculo, una pasión, un amor a la poesía e incluso cuando se le acusa de liberal y de causar daños a sus estudiantes y al sistema escolar, el profesor logra, por medio de buenos argumentos y de una inmensa pasión a la enseñanza y a la sabiduría, conseguir que tanto los que lo acusaban como los que dudaban de él, dejaran de atacarlo.

Pronto, cuando los estudiantes tomaron su vida de una manera más filosófica, empezaron a enfrentarse con la dura realidad, con la represión por parte de padres y maestros, con la increíble ola de mentes cerradas que trataban de apagar eso que Keating les había inyectado. Poco a poco, los sueños de los jóvenes fueron frustrándose, en especial el intenso amor por el teatro de uno de ellos que al final, en causa de la hostilidad que su padre hacia la pasión de su hijo, terminó suicidándose al ver que no podía cumplir su sueño.

La película muestra de una manera cruda y dura, la realidad del pensamiento retrógrada de la mayoría de las personas que poco a poco crea una tendencia negativa en la sociedad y algunas ocasiones desemboca en situaciones como la del estudiante.

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