La Traviata

El drama comienza donde una mujer da una gran fiesta para sus amigos, entre todos los invitados está un hombre apuesto que siente algo por la mujer. El hombre revela sus sentimientos con un brindis y ella le responde con un canto de amor despreocupado. La mujer sufre un ataque de tos y trata de alejarse, pero el joven va tras ella y la amina reiterándole su amor, ella queda encantada y se besan.

Los dos viven felices juntos, la mujer vende sus cosas para estar con su amado, pero él se entera y se va para hacer más dinero, durante la ausencia del joven, el padre del muchacho va a ver a la mujer y le reclama que no es buena para su hijo, pero ella le muestra los papeles de la venta de sus propiedades, el hombre comprende y le cuenta que tiene una hija que no puede casarse por el escándalo que se rumora sobre la vida de perdicion de la mujer, ella con mucho dolor decide dejar al joven para que su hermana pueda casarse y regresó a la ciudad para alejarse de él.

De regreso a la ciudad, se muestra acompañada de su antiguo protector, y con él asiste a una fiesta en casa otra mujer de vida elegante que es amiga suya. Ahí la encuentra él  joven, ella aparenta indiferencia, el joven desafía al barón a una partida de cartas, la mujer le ruega al que abandone la fiesta y él pone una condición: se irá, pero con ella. pero no puede hacerlo ha prometido que se alejaría de él para siempre y, para hacer honor a la palabra dada, anuncia a que está enamorada de su protector. Esta confesión provoca en el joven ira y celos,, llama a sus amigos, les revela que su amada se ha sacrificado por él hasta el punto de haberse arruinado financieramente y, por último, lanza a los pies de la joven una bolsa con monedas de oro, como pago por los favores recibidos. Esto provoca la indignación de todos; el padre del joven, que acaba de llegar, reprocha a sus hijo su comportamiento y el barón lo reta a duelo.

La mujer está al borde de la muerte en su cuarto, la enfermedad le ha robado sus últimas fuerzas, el doctor trata de animarla en vano, desde la calle se escuchan canciones alegres, y ella manda a su criada a dar dinero a los pobres, el padre del joven le escribió una carta diciéndole que su amado y su protector se han batido en un duelo, y que ahora el joven sabe toda la verdad, el joven se presenta en casa de sua amada para rogarle perdón.

Pero ya es demasiado tarde. Por un instante, la felicidad devuelve las fuerzas, pero la ilusión se derrumba muy pronto y llega el final, dulcemente le regala a un medallón con su foto y muere en sus brazos.

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