“Si existe un fin de nuestros actos querido por sí mismo, y los demás por él; y si es verdad también que no siempre elegimos una cosa en vista

COMENTARIO CRÍTICO N°2[pic 1]

TEXTO: ÉTICA A NICÓMACO, ARISTÓTELES

Profesor: Daniel Hans Loewe Henny

Sección: 24

Nombre: Macarena Álvarez Díaz

Contextualice y analice el siguiente párrafo de Aristóteles:

“Si existe un fin de nuestros actos querido por sí mismo, y los demás por él; y si es verdad también que no siempre elegimos una cosa en vista de o t r a —sería tanto como remontar al infinito, y nuestro anhelo sería vacío y vano—, es claro que ese fin último será entonces no sólo el bien, sino el bien soberano. Con respecto a nuestra vida, el conocimiento de este bien es cosa de gran importancia, y teniéndolo presente, como los arqueros el blanco, acertaremos mejor donde conviene.”

La “Ética a Nicómaco” explica lo que los griegos denominaban “eudaimonia” que trata sobre cómo ser feliz, la buena vida y el bienestar humano. En resumen el texto refleja la manera de que el hombre pueda vivir plenamente. Todo esto es expresado en conversaciones de Aristóteles con sus estudiantes.

El fragmento expresado en la portada de este comentario crítico da a entender que hay un propósito o una meta a la cual todo hombre debe dirigirse en su vida, que Aristóteles lo llama como “el bien mayor”, éste se puede alcanzar gracias a una capacidad mayor a las otras.

Esta capacidad, o mejor dicho virtud, está dividida en dos: la virtud intelectual y la virtud moral. Aristóteles expresa la intelectual como una mezcla entre la prudencia y la contemplación, llegando a un término medio. La moral es la mezcla de la valentía, la templanza y la justicia. La gran diferencia entre estas dos virtudes es que la intelectual es más un hábito de elección y aplicación, en cambio la moral es más por una costumbre, las cuales el hombre expresa día a día en forma repetitiva y por impulsos.

El fragmento dado por el profesor está fuertemente relacionado con la virtud intelectual de la prudencia. Aristóteles dice que esta virtud está referida principalmente a cada persona. En palabras más claras, se dice que alguien es prudente cuando actúa respecto a lo que le conviene en cualquier ámbito de la vida. Lo anterior explicado esta concreto en el Libro VI, capítulo 5: “Lo propio del prudente parece ser el poder deliberar acertadamente sobre las cosas buenas para la salud y provechosas para él, no parcialmente, como cuáles son buenas para la salud o el vigor corporal, sino cuáles lo son para el bien vivir en general”, Aristóteles.

Relacionando todo esto, la prudencia es la virtud más importante y que conlleva a las otras, ya que sin prudencia uno no puede ser bueno, y si uno es bueno, no se puede ser prudente a la vez.

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