Contitucion Politica

Herbert Marcuse durante su estadía en el instituto de investigaciones sociales en Nueva York en la década de 1930 escribió un artículo denominado “Acerca del carácter afirmativo de la cultura” este en sus primeros párrafos refiere al pensamiento aristotélico respecto al carácter práctico del conocimiento donde se diferencia el aquél útil y necesario y aquél bello. Marcuse dice que “Aristóteles sostiene el carácter práctico de todo conocimiento, pero establece una diferencia importante entre los conocimientos. Donde tiene una escala de valores que se extiende desde el saber funcional de las cosas necesarias de la vida cotidiana hasta el conocimiento filosófico que no tiene ningún fin fuera de sí mismo, sino que se lo cultiva por sí mismo y es el que ha de proporcionar la mayor felicidad a los hombres. La escala es la separación fundamental: entre lo necesario y lo útil por una parte, y lo `bello’ de la misma forma la división entre lo funcional y lo necesario y lo bello y lo placentero, es el comienzo de un proceso que deja libre el campo para el materialismo de la praxis burguesa por una parte, y por la otra, para la satisfacción de felicidad y del espíritu en el ámbito exclusivo de la `cultura’.”

En 1944, y tras dos años de labor Horkheimer y Adorno publicaron, Dialéctica del iluminismo. Fragmentos Filosóficos, este trabajo contiene un capítulo escrito por Adorno titulado “La industria cultural”. Con la expansión del industrialismo, la noción de orden público avanzará por sobre la felicidad personal. Esta situación genera severas tenciones y para mantener el orden público, se diseñaron mecanismos de diversión de masas para mitigar el descontento. La industria cultural responde aceptablemente.

“El amusement es la prolongación del trabajo bajo el capitalismo tardío. La mecanización ha conquistado tanto poder sobre el hombre durante el tiempo libre y sobre su felicidad, determina tan íntegramente la fabricación de los productos para distraerse, que el hombre no tiene acceso más que a las copias y a las reproducciones del proceso de trabajo mismo.”

Las reglas del juego

Se trata de un juego donde una pareja debe realizar una exposición y es examinada por una mesa integrada por cuatro personas. Luego de la exposición, cada uno de los jurados expresa su parecer. Se marcan los pro y contra, la situación de poder en la cual se enmarcan los integrantes del jurado es lo que permite rotular a sus pareceres como defectos y virtudes. Cada uno de los jurados, quienes conforman una entidad superior, cuantifica la exposición de la pareja a través de una nota numérica. Las parejas en general cinco, que obtengan las menores notas quedan “sentenciadas” y deben exponer nuevamente. Es esta nueva exposición, la opinión del jurado cobra importancia, los jurados no colocan una nota individual sino que se actúa como “cuerpo”, y luego de marcar el “progreso” y “el esfuerzo” de las parejas, sólo quedan dos en grado de “amenaza”. Finalmente un nuevo ente abstracto, en este caso “el público” decide quién se queda y quien se marcha, aunque la votación es por quien se debe quedar.

Hasta aquí las reglas, que en algún grado exceden al juego porque éste no puede modificarlas, sino sólo someterse a ellas. No sabemos ante qué juego estamos, podrá tratarse de un examen en un establecimiento educativo, pero se trata de “Bailando por un Sueño”.

La fiesta de la televisión Argentina

Bailando por un Sueño” forma parte del Programa de televisión que se emite de lunes a viernes de 10:15 y 11:30 de la noche, este es un formato de entretenimiento que existe en varias partes del mundo. En las pantallas, se anuncia como la “fiesta de la televisión argentina”. Como es sabido, las fiestas siempre fueron un espacio para la trasgresión.

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