Alhóndiga de granaditas

Alhóndiga de granaditas

Alhóndiga es una palabra árabe que significa almacén, bodega, granero,etc

Se construyo ya que los españoles necesitaban un lugar donde almacenar, maíz trigo, frijol, trigo, oro, etc, ya que por la zona en la que se localiza Guanajuato sufría de muchas inundaciones, según la historia Guanajuato sufrió aproximadamente 45 inundaciones.

La Alhóndiga de Granaditas es un ejemplo del estilo neoclásico, caracterizado por sus formas, que comenzaba a imponerse en la Nueva España a fines del siglo XVIII y que contrastaba abiertamente con las construcciones barrocas que abundaban en la ciudad.

Popularmente se le conocía como el palacio del maíz, ya que era imponente y majestuoso, además ahí también se almacenaba el maíz.

Al inicio del movimiento de la independencia, el 16 de septiembre de 1810, Miguel Hidalgo y Costilla e Ignacio Allende salieron del pueblo de Dolores, y continuaron su camino hasta la ciudad de Guanajuato, los españoles debido al miedo decidieron irse a refugiar a la alhóndiga ya que era una fortaleza invencible tenia altos y gruesos muros, y la entrada era una puerta de madera gigantesca, el 28 de septiembre de 1810 ocurrió un acontecimiento que cambiaria el rumbo de todo, los españoles estaban confiados de estar protegidos en la alhóndiga, pero tal fue la sorpresa que se llevaron ya que los insurgentes pudieron entrar debido a la valentía del Pipila.

El Pípila, cuyo nombre verdadero era Juan José de los Reyes Martínez, con una antorcha y cubierto con una losa, prendió fuego a la puerta de la Alhóndiga y así los insurgentes con toda su gente entraron matando a las personas que había dentro, se dice que hicieron un desastre, ahí se perdieron muchas vidas, la sangre se derramo hasta más no poder, el cura hidalgo decía que era la sed de venganza de los indígenas que por eso de su forma de ser y de actuar.

Lo sucedido en la Alhóndiga de Granaditas marcó la tónica de la lucha entre insurgentes y realistas y le dio un giro inesperado al proyecto político, militar, en esos momentos todo podía cambiar para ambas partes.

El 1 de octubre, las tropas insurgentes abandonaron Guanajuato dirigiéndose hacia Valladolid, donde los españoles, tras conocer lo sucedido en esa ciudad, huyeron a otras partes del virreinato sentían miedo de que ocurriera lo mismo que en la alhóndiga, lo primordial para ellos era seguir con vida.

El 14 de octubre de 1811, tras la caída y fusilamiento de los primeros líderes insurgentes, el general Calleja ordenó que las cabezas de Miguel Hidalgo, Ignacio Allende, Juan Aldama y Mariano Jiménez fueran colocadas en jaulas de hierro y colgadas en cada una de las esquinas del edificio como escarmiento para quienes se atrevieran a revelarse ante las fuerzas españolas, creyeron que haciendo esto la población

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