Bolivar
Enviado por yorliz • 13 de Febrero de 2014 • Tesis • 921 Palabras (4 Páginas) • 189 Visitas
Canción de cuna
esde recién nacido, el niño Simón fue criado y amamantado
por la negra Hipólita, quien lo quiso como a un hijo más.
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SIMONCITO
CORREO DEL ORINOCO
Alcabala a Urapal, Edificio Dimase, La Candelaria, Caracas-Venezuela
www.correodelorinoco.gob.ve
RIF: G-20009059-6
Hugo Chávez Frías
Presidente de la República Bolivariana de Venezuela
Andrés Izarra
Ministro del Poder Popular para la Comunicación y la Información
Alejandro Boscán
Viceministro de Estrategia Comunicacional
Lídice Altuve
Viceministra de Gestión Comunicacional
Texto: Michel Bonnefoy
Diseño, Ilustración y letra de canción de cuna: Luis Cardozo
Corrección: Francisco Ávila
Depósito legal: lf 26920119003149
ISBN: 978-980-7426-06-0
Noviembre, 2011
Impreso en la República Bolivariana de Venezuela,
en los talleres gráficos de la Imprenta Nacional y Gaceta Oficial.
La edición consta de 5.000 ejemplares.
“Solo quiero que la ley
reúna a los ciudadanos,
que la libertad los deje obrar
y que la sabiduría los guíe”.
Simón Bolívar
Distribución gratuita
OBSEQUIO
G o b i e r n o B o l i v a r i a n o
n 1805 viajaron a Roma, y en el Monte Sacro
el futuro Libertador prometió, ante su maestro
Rodríguez, liberar la patria y América:
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uando escuchaban en el pasillo los pasos de su hermana
María Antonia, el niño Simón saltaba al piso y se encaramaba
en un taburete frente a la cocinera que retomaba rápidamente
el batido del chocolate.
En las tardes perseguía las gallinas en el segundo patio con
su hermano Juan Vicente. Juana María, su otra hermana, se sentaba
debajo de un granado y les indicaba cuál gallina debían atrapar.
Así pasó el niño Simón sus primeros años y así ahogó, junto
a la Negra Hipólita y sus tres hermanos, la tristeza por la muerte
prematura de su padre.
u mamá y otras señoras le decían que no era adecuado
que frecuentara la familia Bello, porque eran pobres,
pero el niño Simón tenía la sensación de que cada vez
que hablaba con Andrés aprendía algo nuevo. Años más
tarde sería uno de sus principales maestros, a quien
siempre recordaría por su inteligencia y su sabiduría. 7
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na tarde en que paseaba con su madre por la plaza San
Jacinto, entre los vendedores ambulantes y los vecinos con sombrilla
y sombrero de copa, conoció a un niño un poco mayor que él que se
llamaba Andrés Bello y que lo impresionó porque sabía muchas cosas
y las explicaba con facilidad.
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ero fue en la escuela pública donde el niño Simón Bolívar
conoció el placer del aprendizaje y le tomó el gusto al conocimiento
y a la comprensión de los fenómenos humanos y de las leyes de
la naturaleza. Su profesor, Simón Rodríguez, fue quien le abrió
los ojos sobre el mundo y la historia de la humanidad, sobre las
injusticias sociales y la lucha de los pueblos por su libertad.
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uando murió su madre, Simón sólo
tenía nueve años. El dolor fue tan grande
que ensombreció su carácter e hizo de él
un niño difícil. Ni su abuelo Feliciano,
ni su tío Carlos ni su tutor Sanz pudieron
con él. Sólo aplacaban su indisciplina
los cuentos fantásticos y las historias
de hombres libres en tierras lejanas que
los esclavos le relataban debajo del cedro
junto a las caballerizas.
l maestro Simón Rodríguez le daba
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