Miguel Hidalgo Y Costilla

Miguel Hidalgo y costilla

La independencia de México tuvo siempre como uno de sus pilares fundamentales a la religión católica, esta estuvo muy presente durante todo el proceso independentista hasta el punto de que uno de sus mayores propulsores y el que hoy en día es conocido como el ‘‘Padre de la patria’’ Mexicano fue un cura del pueblo de Dolores muy querido por el pueblo, el cual fue descrito por el historiador y político Mexicano Lucas Alamán de la siguiente manera:

’’ de mediana estatura, cargado de espaldas, de color moreno y ojos verdes vivos, la cabeza algo caída sobre el pecho, bastante cano y calvo, como que pasaba ya de sesenta años, pero vigoroso, aunque no activo ni pronto en sus movimientos, de pocas palabras en el trato común, pero animado en la argumentación a estilo de colegio cuando entraba en el calor de alguna disputa. Poco aliñado en su traje, no usaba otro que el que usaban entonces los curas de pueblos pequeños. ‘‘1

La participación Del Cura Hidalgo en la independencia mexicana comenzó en el año 1808, con la Proclamación de José Bonaparte como rey de España, en este año el cura conoce al capitán Ignacio Allende y a un notable grupo de criollos (Juan de Aldama, Miguel Domínguez, etc.) que llevaban tiempo celebrando reuniones conspirativas en Querétaro donde se discutía acerca de la conveniencia de sustituir a los españoles peninsulares en los centros de poder, del rechazo a que Nueva España quedara bajo el dominio napoleónico y quizás incluso de proclamar la independencia si las circunstancias eran propicias. Muy pronto Hidalgo no solo se incorporó a esta camarilla, sino que fue designado líder de la misma. Había un claro interés en este nombramiento, pues de todos era conocido su ascendiente sobre indios y castas, es decir sobre aquellos que en principio debían componer el grueso del ejército insurrecto. Tras algunas vacilaciones los conjurados fijaron la fecha del levantamiento para principios de diciembre de 1810, pero la denuncia de estas actividades subversivas en los primeros días del mes de septiembre precipitó los acontecimientos 3, y así fue como la madrugada del 16 de septiembre de 1810 comienza (estrictamente hablando) La guerra de independencia, cuando el cura Miguel Hidalgo da el llamado ‘’Grito de Dolores’’.

Si bien no se conocen con exactitud las palabras utilizadas por el cura en el grito, si se tiene claro que en el hizo referencia al Rey Fernando VII (dejando en evidencia que el pueblo mexicano seguía siéndole fiel a este, el rey legítimo, cuyo poder le fue otorgado por Dios), A la religión católica (más específicamente a la Virgen de Guadalupe, la que había sido proclamada patrona de la nación mexicana en el año 1737 con motivo de la erradicación de una peste.2) y al mal gobierno (Rey ‘‘ilegitimo’’ de España, José Bonaparte) .

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