Unificación De Italia

Unificación de Italia, Alemania y movimientos obreros

El presente escrito contendrá el porqué de dos acontecimientos pasados muy importantes…las unificaciones de Italia y Alemania y los movimientos obreros; para esto se analizó una lectura que abarca ambos temas de cierta manera que se nos es fácil de entender.

Las unificaciones de Italia y Alemania fueron movimientos que tanto anhelaban estos países, ya que estaban hartos de ser parte de un dominio austriaco y a la vez francés y en el caso de Alemania también contra Dinamarca. Desarrollaron ideologías nacionalistas conservadoras y liberales. Al principio el imperio austriaco lograba contener a los movimientos de una manera brutal.

Al final de estas luchas Alemania consiguió consolidarse como un imperio y se desarrolló económicamente muy bien, Italia consiguió a Venecia y se logran unificar Italia de norte con Italia del sur además de dominar los territorios pontificios.

Los movimientos obreros fueron en dos tipos: el ludismo y el cartismo donde los trabajadores se revelaron en contra de las nuevas máquinas que aparecieron; el ludismo fue un movimiento muy agresivo y violento en donde solo se destruían las máquinas. Por otro lado el cartismo fue mucho más tranquilo y “movilizó con éxito a la mayoría de los trabajadores y de las clases populares, con un objetivo específicamente político: la democratización del estado”

Al fin de estos movimientos surgieron nuevas formas de pensar o ideologías que más adelante serán muy significativas en el mundo actual y buscaran que la sociedad consiga esa mejor vida por la que tanto ha luchado.

En conclusión todos estos movimientos fueron realizados por descontentos del pueblo que ya sea que este harto de depender un país extranjero y quiera ser un solo país ya unificado, o bien que busquen una mejor condición de vida no solo en sus casas si no también, poder trabajar en mejores condiciones con más derechos y beneficios que les garantice que podrán seguir trabajando por un cierto tiempo. Todo es para tener una buena vida digna y libre

Joaquín Prats (2000) “Historia Universal Contemporánea”; Barcelona; Anaya pág.122

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