ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Zaha Hadid

zukecaraza1 de Junio de 2014

905 Palabras (4 Páginas)438 Visitas

Página 1 de 4

Sus críticos le dicen diva y ella les responde: “¿Me llamarían diva si fuera un hombre?”. Una respuesta que la arquitecta Zaha Hadid les da a quienes la ven solo como la mujer de temperamento fuerte en un mundo que ha estado dominado por hombres y en el que ella se ha abierto camino con un trabajo que podría resumirse en una palabra: audaz.

Ella no es una mujer ni una arquitecta tradicional. Nació en Bagdad pero fue criada en una sociedad liberal en el tiempo en que Irak era más parecido a Occidente. Hija de un político fundador del Partido Nacional Democrático Iraquí, fue criada entre Suiza e Irak por monjas francesas y al mismo tiempo en un ambiente intelectual. Esta mezcla particular le dio a Zaha razones para ser arquitecta, profesión que en el Medio Oriente no tenía espacio para las mujeres.

Quizás por eso estudió primero matemáticas en la Universidad Americana de Beirut y luego se fue, en 1972, a la Architectural Association School de Londres, un espacio donde la libertad imaginativa era la base. Zaha encajó perfectamente y allí empezó a forjar un estilo bajo la tutoría de Rem Koolhaas, hoy uno de los arquitectos más influyentes del mundo, quien la definió entonces como “un planeta en su propia órbita inimitable”.

El planeta Hadid no se detuvo y empezó a dejar huella con propuestas de edificios que parecían inconstruibles. Su estilo se enmarcó dentro de la arquitectura neo-modernista, con diseños que parecían desafiar la geometría. Por algo ha dicho: “Si hay 360 grados, no hay razón para restringirme a uno solo”.

De hecho, esta es una de las pocas frases que se conocen de esta mujer cuya personalidad tiene algo de misteriosa y, sobre todo, de percepciones disímiles. Los adjetivos son variados: cálida, amable, rebelde, atrevida, difícil, estricta, y otros que la han llevado a ser “la más odiada arquitecta de Inglaterra”. También, claro, hay adulaciones que se resumen en un apelativo que la define a la perfección: “militante vanguardista”.

Pero críticas y elogios no la afectan. Ella mantiene un temperamento enérgico que no disimula ni siquiera con sus clientes. “Zaha simplemente no se comporta como otras personas esperan”, han dicho algunos para justificar su carácter. El mismo que oculta su vida privada de tal manera que apenas se sabe que es una mujer soltera y sin hijos que vive solo por la arquitectura. “Si no te mata entonces no eres bueno. Tienes que meterte de tiempo completo, no puedes afrontarla yendo y viniendo”, ha dicho sobre su pasión por el oficio.

Por eso para hablar de Zaha Hadid hay que hacerlo a través de su obra, un trabajo monumental que según ella salió de la influencia de arquitectos como Erich Mendelsohn, Mies van der Rohe y Le Corbusier. De ahí surgieron ideas fascinantes que en un comienzo parecían más decepciones que realidad.

Le ocurrió en 1982, cuando les ganó a 600 colegas para construir The Peak, un spa de lujo en Hong Kong que nunca se hizo. Lo mismo sucedió con un edificio de oficinas en la famosa calle Kurfürstendamm de Berlín, un centro cultural en Düsseldorf y la Ópera de Cardiff, en Gales, que al final se construyó con otros diseños más conservadores. De ahí que Hadid fuera conocida como “arquitecta de papel”. De alguna manera era cierto, pues ella no usa computadores para diseñar sino dibujos que a veces se convierten en pinturas.

En 1989 demostró que sus formas podían ser realidad con la estación de bomberos de Vitra, en Weil am Rhein (Alemania). Después hizo en Berlín un edificio de apartamentos y el Mind zone, el espacio de exhibición del Millennium Dome de Londres. Trabajos con los que mostró su interés de crear una arquitectura de espacios interconectados y de aspecto escultural.

Pero solo en el año 2000 consolidó su reputación y calló a quienes decían

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (6 Kb)
Leer 3 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com