Critica A La "civilización Del Espectáculo" De Mario Vargas Llosa

Critica a la “civilización del espectáculo” de Mario Vargas Llosa

Autor: Anglas García, Kevin Arturo.

Mario Vargas Llosa trata defender una “alta cultura” a cuestas de que las demás personas se queden sin alcanzar siquiera un poco de ella. El autor protege a un grupo pequeño poseedor de la ya mencionada “alta cultura”, en sus escritos trata de decir que ellos son la elite que debe ser admirada por las demás personas que no tuvieron, más que la capacidad, la suerte para alcanzar la dicha de poseer una cultura mejor de la que tienen.

En cuanto a la democratización de la cultura llosa sostiene que estuvo bien como proyecto pero no como echo ya que produjo su banalización, es decir que llega a la conclusión que la alta cultura solo esta echo para una elite reducida y los demás son incapaces de alcanzarla, solo para añadir dice que la educación no es una vía transmisora de cultura si bien esta en lo correcta, Llosa abre una gran brecha entre la educación y la cultura, pero acaso la educación no sienta las bases para poder percibir la “alta cultura” ya sea en el aprender a leer y escribir o en la capacidad crítica que se obtiene o se debe obtener en un aula de estudios, además la cultura es algo que se capta y practica en cada instante de nuestra vida y ¿acaso no es que gran parte del tiempo la pasamos en los centros educativos? Volviendo a lo anterior personalmente no creo que haya sucedido una democratización de la cultura sino un bombardeo de propaganda utilizando como medio a las artes y a los artistas para convertirnos en sujetos consumistas, para que suceda una verdadera democratización es necesario una educación adecuada para poder percibir la cultura en su totalidad, bueno creo que en la buena educación y en la transmisión diversas culturas esta la solución a lo que Vargas Llosa ya no llama problema porque según el ya no existe solución.

Para Mario Vargas llosa los medios de información masivos han perdido totalmente su carácter informativo y se han convertido en un mero espectáculo, dice: “al exponer a la luz pública, como ha hecho el Wikileaks de Julian Assange, en sus pequeñeces y miserias, las interioridades de la vida política y diplomática, el periodismo ha contribuido a despojar de respetabilidad y seriedad a un que hacer que, en el pasado, conservaba cierta aura mítica, de espacio fecundo para el heroísmo civil y las empresas audaces en favor de los derechos humanos, la justicia social, el progreso y la libertad”, pero acaso sin esta información éramos no estaríamos ciegos ante la lamentable corrupción existen. El autor cita también que la prensa a corrompido tanto la política y la sociedad que ha llegado al extremo de convertir en mentirosos a los políticos y no creer en los derechos humanos. Pues bueno para el autor tener al alcance los derechos humanos es necesario el oscurantismo en el que es mejor estar desinformado que creer que los políticos de hoy no son buenos dirigentes de nuestra sociedad.

En el capítulo II señala a culpables de la banalización de la cultura, y los encuentra a los antropólogos como uno de ellos, pues según dice son los distorsionadores de concepto de cultura, cuando por el hecho de evitar la discriminación llamaron cultura a toda expresión existente y sustentaron que ninguna es mejor que otra, pero acaso usted que debe estar leyendo este párrafo acaso no prefiere aceptar esta idea de cultura que presenciar a diario múltiples victimas

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