Romanticismo Frances

                                Universidad Metropolitana de Ciencias de la Educación[pic 1]

                                Facultad de Historia, Geografía y Letras

                                Departamento de Castellano

Informe de lectura:

Don Guillermo, María y Pedro Páramo

Literatura Hispano-Chilena Moderna

Profesor Orlando Vidal L.

Integrantes: 

Leticia Cruces Hernández

Tercer año A

23 de septiembre de 2015

Introducción

        En el presente trabajo, nos dispondremos a estudiar, analizar y comprender la temáticas románticas francesas, situando a Emma, personaje principal de Madame Bovary, como heroína romántica, para ello dispondremos de antecedentes del Romanticismo en general,  luego del Romanticismo francés: características, motivaciones y preocupaciones de sus representantes y personajes, después de Madame Bovary como obra en sí misma, para posteriormente establecer a Emma como la heroína trágica más destacable de todos los tiempos.

Comprobaremos que Emma posee todas las características necesarias tanto para ser parte del romanticismo como para pasar a ser su protagonista, vale recordar que cada vez que nace una obra de alguna forma modifica el género.

        Presentaremos a Emma de forma descriptiva hasta poder establecer su sitio dentro de este movimiento, para luego poder darle valoración a su participación dentro de este. Rescataremos desde sus características principales hasta los detalles que la convierten en quién es. Relataremos de forma ligera, pero específica su vida para poder conocer su transición evolutiva hasta presenciar el colapso.

        Para ello consultaremos material bibliográfico como nuestras pruebas revisadas en clases, el texto “Madame Bovary: la orgía perpetua” de Mario Vargas Llosa y “El espíritu de los románticos europeos” de Schenk. 

Todo lo anteriormente mencionada para incidir en Emma como mujer romántica.

1.1 Antecedentes del Romanticismo

        El romanticismo se basa en la reivindicación de lo particular frente a lo colectivo, y en la rebeldía creadora por parte de los poetas, que quieren terminar con las normas para la creación literaria que prescribe el Clasicismo como por ejemplo las normas aristotélicas, como la regla de las tres unidades de tiempo, espacio y acción, que se transgreden en el drama. Se trata pues de un movimiento que aboga por la libertad del arte.

El Romanticismo se caracteriza por una voluntad de explorar todas las posibilidades artísticas con un fin expresivo. Los valores estéticos y morales del romanticismo, sus ideas y tópicos nuevos no tardaron en influir sobre otros ámbitos, en particular la literatura, la pintura y la música.

El espíritu de los románticos europeos es la búsqueda de la individuación por sobre la sociedad, es perseguir la propia esencia un comportamiento libre, moral y verdadero. La moral entendida como verdad individual, libre y verdadera que solo se consigue a través de la creación donde la esencia y la presencia están en armonía, el hombre se muestra tal cual es.

1.2 Romanticismo francés

        La generación de 1815, tras la caída de Napoleón, estuvo menos dispuesta a someterse a las normas sociales y más prontas en hacer del “yo” la medida del universo. Es por este “yo” atormentado y orgulloso por quien los artistas iban a expresarse, abandonando finalmente las formas que les habían sido legadas. También en las corrientes filosóficas se presentó un cambio, en contraposición a la generación anterior, ilustrada.

En Francia, el enemigo fue el Clasicismo y el exacerbado racionalismo filosófico de la Ilustración, en el fondo surge como una reacción contra el predominio de la razón, por esto presta sentido al hombre, pero no en el sentido humanista propio del Renacimiento, sino de una forma en que predominen el sentimiento y la emoción.

En muchas obras propias del Romanticismo francés se mira hacia el pasado, sobre todo a los tiempos medievales, y se fija la atención a la figura del héroe, a los espacios como los castillos, a la descripción de atardeceres, pero por sobre todo de la naturaleza de una forma contemplativa y espiritual, como es el caso de Hernaní, de Víctor Hugo.

En suma, el contacto con la realidad era escaso y predominaba la fantasía que solo era superada por el sentimiento.

Podríamos decir que el Romanticismo francés se asemeja al alemán en el sentido crítico que posee y por su postura contra el Racionalismo.

En Francia, el movimiento romántico presenta características como el esfuerzo por despojarse de la literatura tradicionalista, por destacar la libertad, lo individual y la verdad, pero de todas formas es el amor el que ocupa más espacio, este amor debe ser ideal y fantasioso, acompañado de un sentimiento ligado a lo natural y a las ensoñaciones melancólicas, junto con héroes apasionados y vengadores, personajes a quienes la sociedad les niega sus derechos. El protagonista tanto del drama como de la novela romántica francesa debe ser un amante apasionado y abatido, con espíritu individualista en el sentido de querer manifestar sus ansias de libertad, lucha contra la ideología de su época, cree en la libertad y no se deja escarmentar por nada ni nadie, es tal su ímpetu que el héroe pasa por sobre las leyes morales de conducta, asienta la pasión y el instinto, es decir, se deja llevar por las más extremas emociones.

Al mismo tiempo, este héroe o heroína, vive en angustia ya que sus expectativas son por completo idealizadas, es por esto que se impacta de frente contra la realidad y experimenta momentos de crisis, expresando así el carácter trágico de su existencia, terminando con el suicidio.

Como mencionábamos anteriormente, la lucha constante contra la ideología anterior, el Romanticismo francés renueva la literatura, ya sea en expresión del contenido como en el contenido de la expresión.

2. Madame Bovary

        Madamme Bovary es una obra romántica perteneciente al romanticismo francés escrita por Gustave Flaubert, cuenta la historia de Emma una  mujer que vivía con su padre en el campo y que solo tiene en la cabeza las novelas románticas que tanto lee, Emma cansada de la vida con su padre conoce a Charles Bovary un médico modesto en quien ve la oportunidad de dejar a su padre y buscar la vida que tanto soñó. La estrechez de miras de Charles y la placidez de una vida frívola dejan insatisfecha a Emma, cuya insatisfacción no se logra aplacar ni a través del nacimiento de su hija, debido a lo insatisfecha que se siente comete el adulterio con Rodolphe y León, quienes la inducen a creer que ha encontrado la pasión que tanto ha buscado, pero Emma vivirá siempre desgarrada entre la miserable realidad en la que vive y el ilusorio mundo que encuentra en las novelas románticas que tanto lee. Madame Bovary termina teniendo malas experiencias con sus amantes y concluye siendo embargada debido a las deudas que posee y esto la lleva al trágico suicidio, el final que alcanza todo héroe romántico.

        Flaubert a través de Madame Bovary crítica a la  sociedad burguesa de su tiempo, cuestionando el tradicional orden social establecido, los rígidos y absurdos convencionalismos morales, la decadente y alienadora religión cristiana y la férrea y autoritaria educación, entre otros aspectos. En  Madame Bovary hay romanticismo por la entrega de Emma a su imaginación y a su subjetividad, así como la expresión y su idealización de la naturaleza.

Tratábase, casi siempre, de novelas amorosas, donde había amantes y damas perseguidas que se desvanecían en pabellones solitarios […] Más adelante, aprendió con Walter Scott cosas históricas […] Hubiera querido vivir en algún castillo feudal, como aquellas castellanas de de talle esbelto esperando ver llegar a un apuesto caballero de blanca pluma galopando sobre negro corcel.

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