Análisis de película Los chicos del coro

Emanuel Estrada Castañeda

Análisis película los chicos del coro.

2 de marzo de 2024

Maestra: Irene Gudiño

La trama principal de la película nos muestra cómo un profesor prácticamente sin trabajo y músico fracasado consigue a través de la música y del dialogo, paciencia y respeto hacerse con un grupo de niños rebeldes de un internado, muchos de ellos huérfanos, a causa de la II Guerra Mundial.

La enseñanza juega un papel muy importante en la película, ya que nos muestra dos visiones de la enseñanza. Mathieu representa el “dialogo educativo” a través de la paciencia y equidad y el director Rachin, quien gobierna mediante la “acción-reacción” con estrictas reglas y castigos, utiliza la fuerza si es necesario que se impone a través del miedo, y a quien los niños temen, pero no respetan.

Cabe destacar que la frase “acción y reacción”, no es una estrategia ni tampoco un método educativo, es un régimen dictatorial, no es una forma de educar, porque a través de la violencia no se educa, se hace a través de medios que incentiven a los niños, que los lleven a confiar en sí mismos, en sus potencialidades y que, con el apoyo de sus familiares, aunque en este caso la mayoría son huérfanos, pero a través del profesor Mathieu logren superarse. Hay que saber ser maleable y adaptarse a los cambios de las sociedades, pero siempre que haya amor, respeto y compromiso se podrá crear un verdadero lazo de educación.

Al inicio el profesor Mathieu llega a la institución y ve la posibilidad de un cambio y, por tanto, una apuesta personal por los niños y jóvenes. Esto se pone en marcha cuando dice una frase “no cantan bien, pero cantan “y eso lo que lo motiva no sólo en el trato hacia ellos, sino en la capacidad y la virtud de la paciencia (elemento fundamental en el ámbito de la enseñanza) y ganarse el afecto y el reconocimiento de sus alumnos.

Un buen educador, no sólo ve contenidos y resultados, sino que ve posibilidades, capacidades y, sobre todo, personas.

Ese es el secreto del éxito del coro que construye y que sirve de interacción entre el internado > el profesor, profesor > alumnos e institución y exterior.

La figura del profesor Clément Mathieu es la de la bondad y la entrega por unos alumnos a los que no ve simplemente como un “modus vivendi” es decir, no son solo un trabajo.

Son una especie de reto constante a su vocación a la enseñanza y su respuesta nace de ese compromiso con lo que lleva en lo más profundo de su interior y, esta circunstancia, se pone de manifiesto en la didáctica que emplea con los alumnos  en sus sinónimos como amor hacia los demás, comprensión, ayuda y atención para el que está más necesitado; ofrecer lo mejor que uno tiene y compartirlo y dar lo mejor de sí, que incluso al final los demás personajes como el director entienden y se unen a el en el modo d enseñanza.

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