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La Industria


Enviado por   •  16 de Septiembre de 2014  •  1.976 Palabras (8 Páginas)  •  178 Visitas

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LA INDUSTRIA

El hombre ha ido buscando la manera de facilitar el proceso de su evolución. A medida que pasa el tiempo, inventa mecanismos cada vez más sofisticados para satisfacer sus necesidades primordiales y a la vez los perfecciona. Al mismo tiempo que el hombre evoluciona, aumentan sus necesidades y su ambición de mejorar su nivel de vida. De la manufactura artesanal, sencilla, dirigida a un público minoritario, pasa a la manufactura industrial, sofisticada, impregnada de ciencia y tecnología, que satisface las necesidades de un mercado más amplio, en este caso un país.

CONCEPTO DE INDUSTRIA

La industria es el conjunto de procesos y actividades que tienen como finalidad transformar las materias primas en productos elaborados, de forma masiva. Esta actividad económica conlleva los esfuerzos realizados por el hombre dedicado a la producción, la distribución y el consumo de bienes así como la prestación de servicios dentro de una sociedad.

La economía ha otorgado a la industria, desde el origen de esta ciencia, un papel clave en el desarrollo de las naciones; de hecho, se emplea el término ‘país industrializado’ como sinónimo de ‘desarrollado’. Tampoco puede considerarse casual que la ciencia económica naciera como tal en el mismo momento histórico y país que la revolución industrial: la Inglaterra del último cuarto del siglo XVIII.

Se suele considerar a la industria como el segundo de los tres sectores básicos en los que se divide la actividad económica. El sector puede ser subdividido en muchos tipos. La primera clasificación la realizó el economista francés Jean-Baptiste Say (1767-1832), que distinguía entre industrias extractivas, manufactureras y comerciales; las primeras transformaban recursos naturales en productos utilizables por el resto de la industria, las segundas convertían estos productos en bienes de consumo o inversión y las terceras los distribuían a los consumidores. En la actualidad, para la clasificación se emplean diversos sistemas codificados y normalizados a nivel internacional, como los empleados por las Naciones Unidas, el Banco Mundial o la Unión Europea.

Una de las principales fuerzas productivas del capital industrial es la cooperación como ha sido visto anteriormente. De esa cuenta es importante establecer el de la industria nacional según el número de personas ocupadas por el establecimiento industrial.

Un aspecto importante de la fuerza de trabajo, es el nivel de calificación, lo cual es prácticamente imposible de apreciarse de forma directa ante la falta de estadísticas, sin embargo el nivel de educación puede ser una buena aproximación del grado de calificación de la fuerza de trabajo, en el grupo de artesanos y operarios que forma el núcleo de la población industrial un 28.9% carece de instrucción, un 55.7% poseen educación primaria, y solo un 14.8 % tienen instrucción a nivel secundario (INE).

Un aspecto de las fuerzas productivas que no se toma a menudo en cuenta es el de la inversión total en activos fijos, para el caso de la industria manufacturera guatemalteca, puede verse cómo paulatinamente, esta capacidad del capital de producir se ha ido mermando como consecuencia de capacidades ociosas en la plata industrial

Y la disminución de la capacidad instalada por la falta de reposición del equipo fabril consumido.

Energía en la industria

Para la actividad industrial es fundamental la existencia, y el consumo, de energía que mueva los ingenios y las máquinas.

En épocas preindustriales las fuentes de energía eran renovables: cursos de agua, vientos y animales eran un factor de localización fundamental, puesto que sin ellas no puede haber industria.

Con la revolución industrial y la invención de la máquina de vapor por James Watt en 1767, la industria se libera un poco de esa dependencia tan estricta. Sin embargo, la máquina de vapor funciona con agua y carbón, ya sea este mineral o vegetal, y por lo tanto alcanza su óptimo de producción en lugares en los que haya estos dos recursos en abundancia. Las primeras industrias, que funcionan principalmente con máquinas de vapor, se localizan en regiones carboníferas, de carbón mineral, que es más barato que el vegetal, y en zonas húmedas, en donde el agua (aún no se habían regulado los ríos) era abundante. Son regiones como el Ruhr, Inglaterra, el norte de los Apalaches o Asturias, en España.

La liberación definitiva se consigue con el abaratamiento del transporte, la producción de energía eléctrica y su transporte a larga distancia. Cosa que sólo ocurre en el siglo XX. Hoy en día la mayor parte de las máquinas industriales son eléctricas; y para las que no lo son el transporte de carbón, petróleo o gas es muy barato. Además, existe una política, al menos en Europa, de precios uniformes para el consumo de electricidad. Esto ha permitido liberar totalmente a la industria de una localización cercana a las regiones productoras de energía. En el caso de España las principales regiones productoras de energía son Castilla y León, los Pirineos, Galicia y Castilla-La Mancha; sin embargo, las regiones más consumidoras son Madrid y el Levante. En general, en todos los países las regiones productoras son pobres y están despobladas; ya que la producción de energía es una de las actividades más contaminantes, con más impacto ambiental y que más rechazo producen entre la población. Por el contrario, las regiones consumidoras son las más ricas y pobladas. En todo caso, las zonas donde se produce la energía están alejada de los núcleos importantes de población, aisladas en regiones montañosas; pero las zonas de mayor consumo son las ciudades y su entorno industrial.

El recurso energético básico para la producción industrial es la energía eléctrica, salvo para el transporte, los altos hornos y la propia producción de energía eléctrica.

La producción de electricidad necesita otras fuentes de energía, de las que no puede prescindir. Dos son las fuentes de energía básicas, para la producción eléctrica: la hidroelectricidad y la termoelectricidad.

La posibilidad de instalar potencia eléctrica por medios térmicos es muy superior a la hidroelectricidad, ya que no precisa de condiciones naturales favorables, y es apta para ubicarse en regiones secas o llanas.

Existen otras formas de producir electricidad, con fuentes de energía renovables: eólica, solar, geotérmica, etc.; pero tienen el mismo inconveniente que la hidroelectricidad: necesitan unas condiciones naturales óptimas, y su producción no se podrá incrementar mientras que no se consiga un cambio tecnológico sustancial. Sólo la energía solar puede

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