Analisis de test

Elegimos 2 test de revistas juveniles, ambos están enfocados en el tema del amor, afirmando que después de responder el test sabrás qué tipo de relación estás llevando o que tipo de amor tienes con tu pareja.

Ambos presentan situaciones comunes de la vida cotidiana, esto para el que lo resuelva tenga un proceso de reflexión y seleccione el que se sienta más identificado, estas situaciones se presentan en tres tipos a) fatalista, presenta un supuesto regularmente complicado, lleno de problemas y complicaciones. b) conflictiva con solución, estas presentan situaciones en las que se presenta un conflicto pero su solución es obvia. c) Idealista, este tipo está completamente basado en cosas buenas llegando a rozar la fantasía.

Al resolver los test encontramos que tienen una pequeña proporción de realidad, sin embargo los resultados así como las supuestas acciones y toma de decisiones son exageradas y absurdas. También estas limitan demasiado la acción y no incluyen otros factores que implican la toma de decisión en los momentos en la que la persona puede encontrarse.

Este tipo de pruebas no son eficaces y mucho menos confiables, primero que nada porque no están hechas por profesionales de la salud mental, por ello no contienen las características ideales para conocerse a sí mismo, ni a otros. Por ello la búsqueda de autoconocimiento a través de estas pruebas sólo arroja ideas erróneas de lo que es uno mismo, así como también está no puede ser englobada en un test de una revista de entretenimiento juvenil.

La personalidad no es algo simple de analizar, y menos a través de un serie de preguntas con situaciones simples y vagas que al final dan un resultado muy cerrado de lo que se supone que es uno, es por ello que los profesionales para realizar un test primero realizan una amplia revisión de la literatura, investigación y replicación para llegar un punto más acercado a la certeza, marcando una serie de detalles respecto al tema y convirtiéndolos en reactivos que identifican al perfil, estos suelen ser concretos, simples y racionales así como también estas no son clasificadas cuantitativamente ni valoradas como correctas o incorrectas. Aun así estas pruebas históricas siguen causando controversia por su nivel de validez y confiabilidad aunque sigan siendo utilizadas como métodos e instrumentos para la exploración de la personalidad, y empíricos, al igual  que el psicoanálisis siguen siendo consideradas como sumamente subjetivas, por ello no científicas. Estas son apuntadas por su dificultad de ser generalizadas válidamente evitando que tengan confiabilidad. Aunque debe reconocerse que estos funcionan como mediadores entre los constructos logrando así la visualización de la operacionalización de alguno de los constructos teóricos, dándole un valor operacional.

Las personas que suelen escribir este tipo de test no tienen ningún tipo de preparación para hacer una interpretación de la personalidad y suelen basarse en otros test previamente realizados. Existen pruebas hechas por psicólogos como la escala de McHugh la cual está compuesta por un total de 150 reactivos, es de autoaplicación y está enfocada a la consejería de pareja, los reactivos de dicha prueba se contestan indicando la presencia o ausencia de  características relevantes en la convivencia de pareja, por ejemplo los hábitos personales, qué religión practica, estado de salud, si existen intereses comunes, actitudes sexuales, capacidad de adaptación, bagaje cultural, si la pareja tiene o no un buen sentido del humor, qué tan ambicioso es, si posee dinero, cómo se relaciona con otras personas, interacción con la pareja, si se llevan bien y que tanta compatibilidad consideran tener.  

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