Condicionamiento

¿Para qué sirve el Condicionamiento Clásico?

El estudio del Condicionamiento clásico no sólo nos lleva a entender el aprendizaje sino que tiene importantísimas aplicaciones.

Watson, creador del conductismo, demostró que un niño aprendía a sentir miedo y gritar ante una rata blanca que antes no le producía ningún miedo, mediante condicionamiento. Para elo, Watson presentó varias veces al niño una rata blanca e inmediatamente producía a sus espaldas un ruido con un hierro, que se había comprobado que aterrorizaba al pequeño, haciéndole gritar. El niño se condicionó y aprendió a tener miedo a la rata y a gritar al verla.

El famoso terapeuta Wolpe ha mostrado que muchas de nuestras conductas neuróticas se deben a miedos aprendidos por condicionamiento clásico y que el modo de curar esas conductas es extinguiendo esos condicionamientos. Un ejemplo son los problemas sexuales: La impotencia secundaria está causada por un condicionamiento de miedo al acto sexual. Extinguiendo ese condicionamiento, lo que se hace con relativa facilidad, las conductas se normalizan y se curan los padecimienos como la impotencia o la frigidez.

Algunos drogadictos mueren por sobredosis aún habiéndose inyectado la dosis habitual. Esto se explica de esta forma: los drogadictos se aplicaron la droga en condiciones especiales (ellos solos, sin los amigos, o en un lugar diferente) por lo que estuvieron faltos de la respuesta compensatoria de estímulos condicionados y por tanto la misma dosis produjo mayores efectos

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