Definición De Psicología

Para definir a la Psicología como una ciencia se necesita acotar su campo de estudio. La respuesta más lógica y común es que la Psicología estudia el comportamiento humano, luego entonces, la Psicología es una ciencia que tiene como objeto de estudio el comportamiento humano. Esta idea, de entrada parece apropiada pero ella misma presenta el primer conflicto. Si por comportamiento humano se entienden tanto los actos y acciones expresadas en términos de conductas objetivas medibles y cuantificables, así como los hechos de la experiencia subjetiva compuestos de emociones, pensamientos, prejuicios, valores o creencias que no se pueden observar objetivamente, originados todos, tanto conductas como experiencias subjetivas, por la actividad eléctrica del cerebro, caemos en el conflicto de la encrucijada explicación-comprensión, observando la escisión de la psicología en científica y psicoanalítica. Esta división conlleva consecuencias en los métodos que se siguen para estudiar los objetos propios de su campo. Las psicologías científicas, encargadas de medir y cuantificar las conductas, se alinean al método científico con una epistemología empirista en la cual el conocimiento científico se obtiene por medio de un proceso reflexivo-discursivo del investigador. Mientras que, las Psicologías psicoanalíticas, entregadas al análisis del aparato psíquico del hombre, se apegan a una tradición aristotélica, cuyo principal método de investigación es la introspección y su epistemología es de corte práctico teórico o discontinuista materialista.

Hasta lo expuesto en este punto, el conflicto que se presenta al definir a la Psicología está planteado en términos de objetividad, validez y generalidad. Sin embargo, los conflictos no se detienen aquí. Si se retoma lo que plantea Braunstein, las Psicologías científicas no tendrían resistencia de las clases dominantes ya que no representan peligro alguno para su estatus. Al contrario, el análisis de las conductas, como en el caso del condicionamiento de conductas producto del conductismo de Skiner, permite sujetar a los individuos a los procesos, tanto económicos como jurídico-políticos, en los que intervienen. Empero, la situación de las Psicologías psicoanalíticas es bastante diferente porque este tipo de psicologías, de acuerdo con Braunstein, atentan contra los intereses de la jerarquía dominante al darle elementos a los individuos para que se den cuenta de que están enajenados y que sus conductas están dictadas por las enseñanzas que recibieron en los primeros años de su vida, de modo que aprehendieron a vivir estoicamente oprimidos por las clases privilegiadas.

De acuerdo con lo anterior, el nuevo conflicto al que se enfrenta la Psicología en su definición, en su vertiente psicoanalítica, es una cuestión que enfrenta al poder establecido, que da cuenta de la dominación de masas y de la alienación de los individuos. Sin embargo, los conflictos siguen sin terminar aquí. En un principio se señaló que las psicologías científicas tienen como objeto de estudio el comportamiento humano expresado en términos de conductas, empero esta definición es lo suficientemente amplia que no permite diferenciar a la Psicología de otras ciencias humanas como la Sociología o la Pedagogía, por señalar algunas, que también estudian el comportamiento humano. Este conflicto en la acotación de lo que se estudia relacionado con el comportamiento humano se explica por

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