ENCUESTAS MARU

Sensibilizar a la comunidad, los entes sociales y gubernamentales que el flagelo de la violencia conyugal se ha convertido en un problema de salud publica en la cual todos debemos intervenir en la búsqueda de la solución y aplicación de las medidas pertinentes para evitarlo de forma radical.

3. Objetivos específicos

• Educar a hombres y mujeres acerca de esta problemática en pro de disminuir el alto índice de casos reportados.

• Conocer los factores de riesgos que se distinguen en la problemática de violencia conyugal contra la mujer.

• Indagar cuales son los efectos colaterales en la salud mental en mujeres que padecen o son víctimas de violencia conyugal.

-recomendaciones:

-En la medida en que los miembros de una familia se relacionen con base en el respeto, la igualdad, la confianza y el afecto, y sean capaces de valorar la maravilla que significa tener gente cercana a quien cuidar y por quien ser cuidado, con quien compartir la vida y explorarla, a quien querer sin condiciones, el problema de la violencia será manejable y no desbordará los límites de la dignidad humana, asegurando así que el sentido de las relaciones entre las personas no se pierda.

Las relaciones familiares afectuosas, además de ser uno de los mayores bienes a que se puede aspirar en la vida, abren a los niños y a las niñas mayores posibilidades de convertirse en personas sanas, amorosas y felices y en ciudadanos conscientes de sus derechos y obligaciones.

En el caso de la persona violentada, es esencial que busque apoyo psicológico. Para ello, puede participar en terapias individuales o grupales. La finalidad es lograr que se sienta contenida y no como una víctima.

Respecto del agresor, lo primero es conseguir que reconozca su problema. Luego, también es necesario que asista a psicoterapia

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