Historias De Divan Series Complementarias

Violencia familiar

Con respecto a la regularidad social, (ligada a normas que expresan valores, tejidos por la sociedad, familia, matrimonio, propiedad privada, etc.), vemos como en una situación de violencia familiar se omiten e ignoran estas normas, dejando frágil la institución familiar, y a su vez queda a la vista una ruptura lógicamente en la organización social, que es el conjunto de normas.

En los textos de Bauman podemos destacar el tema de la emancipación, y de la liberación, es decir, “sentirse libre”, deshacerse de los obstáculos, y es asi como el individuo puede desear deshacerse de ese obstáculo que es su violencia, acudiendo a instituciones preparadas de antemano para resolver la situación que atraviesa, desde la palabra, desde el psicoanálisis, desde la autoayuda, y de alguna manera, brindarle la libertad al sujeto, es decir, como dijimos en un comienzo, “liberarse”, o “sentirse libre”, sin esa opresión que es la violencia.

En el texto de la inteligencia ciega, dice que la realidad no es una sino que hay múltiples realidades, el hombre tiene que estar siempre abierto a otros conocimientos, es decir, el sujeto violento, puede buscar alternativas para reconsiderar cual es el núcleo de la problemática familiar, ósea, abordar dicha problemática desde distintas perspectivas, y no detenerse en una verdad dogmática que puede llegar aparentar una única y posible solución.

En la escuela, la institución educativa debe servir como apoyo de contención a esos niños que en su hogar sufren este tipo de situaciones cotidianas, y el desafío de los educadores consiste en la definición de diseños, en elaboración de herramientas técnicas y metodologica para que los objetivos superen la fase retórica. Pensamos que es necesario redefinir los pactos de la escuela con otros agentes, en particular la familia y los medios de comunicación.

El papel de la escuela debe ser definido por su capacidad para preparar a los niños en una epoca donde la información abunda, a través de los medios masivos de comunicación, y el educador debe tener una relación con esos padres de los niños que ingresan a la institución escolar, por medio de psicopedagogos, o los mismos maestros.

La escuela debe fomentar la liberación de la imaginación, los conocimientos y las libertades individuales dentro de los espacios no normados y es allí donde se pueden observar las características de la personalidad y las condiciones del medio que propician a la violencia familiar.

En el texto de R. Morín, habla de la toma de conciencia, es decir, en tiempos anteriores a los que estamos transitando, la familia era una institución mas sólida, basada en otros valores más rígidos, con otras normas, y otro tipo convivencia, esa toma de conciencia era radical, y hasta a veces dogmática, donde se hallaban verdades absolutas irrompibles que se erradicaban de generación en generación no dejando margen a la duda, ni a cuestionar esos valores.

Hoy en dia esa toma de conciencia deja márgenes ligados al libertinaje, y quizás al contexto de esta cultura argentina. Otra posible respuesta, es que en la posmodernidad, se busca las soluciones rápidas, no existen las verdades absolutas, sino que son verdades provisorias, que dejan margen a la duda, y la familia es disfuncional, y no sigue el modelo de familia tipo.

La Modernidad, según Bauman, empieza cuando el espacio y el tiempo se separan de la práctica vital entre sí. Así vemos como en la Modernidad existen instituciones que atienden estos conflictos, y a comparación de años atrás estas situaciones se escondían, quizás por pudor, sin posibilidad alguna de que haya intervención de un organismo que brinde información preventiva, con el fin justamente, de evitar este tipo de situaciones conflictivas.

Las posmodernidad no supone una superación de la modernidad, en esta época

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