7 pecados del hombre

Todos los hombres creemos que los pecados capitales o pecados mortales son 7. Pero solo hoy la verdad que leerán jamás ha sido contada a nadie y ahora la sabrás tu. Todos y cada uno de esos pecados en los que caemos se pueden reducir a uno solo: El pecado de la soberbia.

-Ve por ejemplo, La ira. Este pecado no es más que un efecto y escape de la soberbia. Tu soberbia te llama a no tolera ser contrariado, te sientes ofendido por cualquier contraste y hasta la más justa reprensión; Tu con tu soberbia quieres vencer y superar a quien consideras inferior, y eso te arrastra al enojo y la rabia.

-Piensa en el otro: la envidia. El soberbio no puede aceptar que otro hombre tenga virtudes o fortunas de las que tú no tienes; no puedes soportar, a causa de tu ilusión (te crees superior), que otros estén en sitios más elevados que el tuyo o que tengan más dinero y poder. Por lo tanto la envidia es una consecuencia de tu soberbia.

-Si no crees que esto es suficiente también en la lujuria se puede ver, El lujurioso. Tú por tu lujuria quieres someter a tu capricho y placer el mayor número de amantes posibles. El frenesí de la posesión carnal te da la ilusión de una dominación recíproca, o sea, que el verdadero fundamento de esto es tu soberbia. Poseer quiere decir ser dueño y ser dominante. Nada lejano al más puro sentido de tu soberbia.

-Algo más difícil de reconocer es la gula. Cuando comes de más para llenar tu barriga más allá que saciar el hambre, es soberbia pura; Una proeza para poner a prueba tu riqueza y capacidad de hacer valer tu poder engullendo y saboreando tales delicias, en resumen, superioridad.

-También Cuando pecas de avaricia. La voracidad por el dinero y desear más, está muy emparentado con la soberbia. Tú deseas que todo sea tuyo y no compartes con tus hermanos ni siquiera una pequeña parte. Tu sueño de avaro es ser el rico en medio de todos estos pobres, pues sabes que en nuestro mundo en el que vivimos con otros idiotas el rico es respetado, adulado, le lames los huevos. Pero al ser avaro la riqueza no es más que un medio para saciar tu dominio, tu inescrupuloso soberbia.

-¿crees que aún falta uno más?, consideremos la pereza. Como sabes bien, tu pecas de pereza cuando anhelas o pretendes vivir a costa del trabajo de los demás, como si tuvieras un derecho natural al tributo de seres que consideras inferiores, el trabajo te parece indigno de tu “noble” superioridad; Perezoso eres cuando no haces nada y no emprendes algo para mejorarte a ti mismo, por algo la persuasión de los demás es tu herramienta, eres mejor que los demás por eso tienes certeza de todo esto. Otra afirmación de la existencia omnipresente de la soberbia.

Espero haber demostrado, la verdad en lo que te digo: solo un pecado es digno de ser considerado pecado mortal supremo, el horrible y muy humano pecado de la soberbia. Los dioses también pecan de soberbia y es su perdición igual que la nuestra.

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