Cartas A Dios

Mi hijo adorado, que alegría hay en mi corazón al verte buscándome, yo se las batallas y luchas que a menudo te sacan lagrimas, las tristezas de tu corazón que te destrozan en silencio, yo se que anhelas que las cosas cambien como yo deseo lo mejor para ti precioso hijo. Sabes yo te escogí desde el vientre de tu madre para grandes cosas, se los deseos y sueños de tu corazón hijo amado y quiero decirte que aunque sea difícil que me veas, que tus problemas opaquen mi imagen, mi presencia y mi amor están siempre contigo porque TE AMO, siempre lo he hecho y siempre lo hare, Te conozco desde que cree el mundo y nunca me olvido de ti. Quiero luchar contigo, quiero que me ames como yo te amo. Yo he dado todo por ti, Hijo mío eres bendito y eres bendición para todos los que te rodean. Eres mi más precioso tesoro Hijo hermoso y vales todo para mí.

Quien Siempre te Ama.

Dios

Jeremías 31, 3-4

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