LA EVOLUCIÓN Y NUESTRAS CREENCIAS, DOS MUNDOS OPUESTOS

LA EVOLUCIÓN Y NUESTRAS CREENCIAS, DOS MUNDOS OPUESTOS.

A muchos desde nuestra niñez, se nos inculcó que fue Dios quien creó todas las cosas, y hemos vivido creyendo esto, hasta que empezamos a tener contacto con la sociedad; llegamos al colegio o en mi caso a la universidad y nos empezamos a dar cuenta de que existen conceptos diferentes sobre el origen de las cosas. Y es allí que empezamos a sentirnos en un dilema, no sabemos a quién apoyar. Por un lado está la ciencia que plantea que somos producto de la evolución, por otro está la religión que nos dice que todo lo que existe es obra de un Dios creador. Creo totalmente en lo que fue escrito en la Biblia, y es por ello que apoyo la religión cristiana, pero de igual manera, creo que la teoría evolucionista es muy respetable, sus investigaciones y sus puntos de vista.

La religión que se ha definido como un conjunto de creencias humanas que de alguna manera relaciona el origen de la humanidad con la divinidad y que tiene miles de creyentes  en el mundo; y donde se tiene que todas las cosas que hoy existen  fueron creadas por Dios; está en desventaja con respeto a la ciencia que dice que todo las formas de vidas que conocemos hoy son producto de la evolución; porque la religión no se ha preocupado por hacer demostraciones científicas para explicar nuestra creación por ende solo se trata de una cuestión de fe,  que se crea en que somos creación de Dios.

La ciencia por su parte, se ha empeñado en demostrar de dónde venimos y cuál es nuestro origen y a medida que pasa el tiempo ha ido descubriendo más y más acontecimientos que se van unificando, comparados en diferentes escalas de tiempos y que van dando luz a nuestra existencia. Desde mi posición y respetando a todas las personas evolucionistas, me atrevo a decir que a la ciencia aún le falta mucho por descubrir, para que la evolución pueda verse como un hecho; es cierto que se han logrado avances significativos, pero aun con todos estos avances, la ciencia no ha podido demostrar la existencia de Dios. Según la revista de filosofía (2008):

Ciertamente, en estricto sentido, la ciencia no puede pronunciarse sobre la existencia o inexistencia de Dios. Hasta ahora, la ciencia no ha encontrado evidencia para afirmar la existencia de Dios, pero Gould insiste en que eso no es motivo para negar lo divino, pues es perfectamente posible que, en dimensiones desconocidas inaccesibles a la ciencia, se encuentre Dios.

Y como se ha podido observar desde hace mucho tiempo ni la ciencia está de acuerdo con la religión, ni esta última con la ciencia. Esto nos lleva a pensar que las creencias religiosas y los conceptos evolutivos jamás podrán coincidir, porque cada uno tiene objetivos similares y diferentes formas de cuestionarlos, pero a pesar de esto hay personas que aprueban la evolución y tienen creencias religiosas y viceversa; lo que nos da a entender que por más opuestos que sean los conceptos evolutivos y las creencias religiosas, una persona puede convivir con ambas. Según Tamayo (2006):

“La ciencia y la religión no son compatibles porque la razón y la fe postulan que el conocimiento de la realidad se alcanza por medios totalmente distintos y opuestos; además, la religión se ocupa de una dimensión sobrenatural que no forma parte de la ciencia”.

A la hora de inculcar temas de evolución se debe tener en cuenta que a pesar de que no se apoyen las creencias de los demás, estas hay que respetarlas. Pero además de esto si se quiere que los demás crean o crear en ellos interés por lo que se dice acerca de la evolución, se deben tener bases sólidas porque al final de cuentas los argumentos que más pesan son aquellos que se pueden demostrar fácilmente con pruebas o experimentos. Y si alguien se opone a los conceptos planteados lo más obvio seria defender la posición que se tenga y, mostrar las pruebas de investigación que se tienen para tratar de convencer al otro, pero esto no bastaría para una persona que tiene creencias definidas.

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