Funciones

resultan indispensables para la normal actividad de las células, para los procesos vitales. Desempeñan un papel importante en el organismo, pues están implicados en la elaboracion de determinados tejidos como huesos y dientes, regulan la transmisión neuro-muscular, la permeabilidad de las membranas celulares y el equilibrio ácido-base, en la síntesis de las hormonas y, sobre todo, en un buen número de sistemas enzimáticos, regulando el metabolismo. El organismo es incapaz de sintetizarlos y debe tomarlos de su medio ambiente.

Aquellos minerales que se requieren en cantidades superiores a los 100mg/día son denominados macrominerales ó macroelementos, y aquellos que sólo se precisan en muy pequeñas cantidades, incluso en cantidad infenitesimal son los microminerales, oligoelementos o elementos traza.

Entre los minerales, la diferencia entre unos y otros es sólo cuantitativa, porque las cantidades en el organismo son muy variables, todos cumplen criterios de esenciabilidad y su carencia induce a trastornos y anomalias que cursan con cambios objetivables y que desaparecen al aportar el nutriente. Es vital para el individuo mantener una concentración normal de minerales en los líquidos corporales, los oligoelementos en sus pequeñísimas cantidades son indispensables para la salud.

Los oligoelementos representan, en peso, aproximadamente dos milésimas del organismo. Estos microminerales específicos deben mantenerse constantes para que funcionen las vitaminas y enzimas (sustancias de naturaleza proteica que crecen y aceleran las reacciones químicas que tienen lugar en el organismo. Son sinónimo de fermentos). La mayoría de las sales minerales y los oligoelementos son suministrados por una alimentación equilibrada.

¿Por qué surge el déficit ?. Porque no se ingiere en la dieta la cantidad necesaria de productos lácteos y vegetales verdes(acelgas, achicoria, brócoli, etc.) y cuando se hace, al cocinarlos, se pierden muchos de sus nutrientes.

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