Como Piensan Los Consumidores

La neurociencia es una de las que más puede beneficiar al marketing. Los mercadólogos deben valorar el poder y la complejidad del cerebro humano. La corteza cerebral es donde se produce la cognición, ahí albergan 30.000.000 de neuronas formando una red que crean circuitos neuronales que estimulan el pensamiento y la conducta.

El nuevo paradigma restablece las conexiones entre el cerebro, cuerpo, mente y el mundo social que el viejo paradigma separó. Estos 4 componentes están conectados en un sistema dinámico y perfecto donde se influyen mutuamente: el cuerpo percibe, a través de los sentidos, información del mundo, genera respuestas químicas y físicas que crean emociones y pensamientos se mueve respondiendo al cerebro. Esta alianza se ofrece mutuamente información y es plenamente codependiente.

Las habilidades cognitivas han sido adquiridas rápidamente por el hombre gracias al mecanismo clave que ha sido la transmisión social o cultural (más rápida que la evolución). La interconexión del cerebro, el cuerpo, la mente y la sociedad se muestra en la pirámide tridimensional. Los resultados de estas interacciones penetran en nuestros pensamientos conscientes. El marketing descansa en el centro de estas interacciones: todos los campos son críticos para una práctica efectiva de esta disciplina. Muchas empresas no consideran que los 4 componentes importan, por lo que se interpreta la información de forma errónea lanzando productos y servicios que no interesan en el mercado. Esto es producto de que tratar de cambiar nuestra visión es una tarea difícil y aterradora: partimos con supuestos desde una muy temprana edad.

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