El Suicidio

“MI ÚLTIMO DIA”:

¿LO DECIDI O ME ORILLARON A EL?

“No queda otra salida, todo acabara en un instante, todo será mejor cuando no exista, para ser libre solo tengo que saltar, ya nada queda en este mundo para mi”; son algunos de los pensamientos que cruzan por la mente de las personas que están al borde del suicidio; para ellos cosas como el amor y la felicidad son solo mitos, mitos que cuando llegan a cierto punto, es tan falso vivirlos y no queda otro camino que saltar al vacío y terminar con esa farsa. ¿Quién no ha pensado alguna vez en suicidarse?; vivimos creyendo que eso es solo para los bajos de autoestima, para personas con problemas mentales, para personas que no tienen en que pensar que llegan a tener esa clase de pensamientos retorcidos; sin embargo, te asombrarías de las verdaderas razones por las que una persona decide acabar con su vida, razones que quizás cruzaron por tu mente alguna vez sin darte cuenta, eh aquí solo algunas de ellas.

Primero que nada ¿Qué es el suicidio?; su definición etimológica (del latín sui “auto” y caedere o cidium “matar”) estable que su significado es matarse a uno mismo; haciendo referencia a diversos actos realizados por una persona atentando contra sí y su integridad con el objeto de ponerle fin a su propia existencia. La definición de suicidio extraído del Catecismo de la Iglesia Católica, nos dice lo siguiente: “La vida es un regalo gratuito de Dios, debemos recibirla y conservarla, algún día ese regalo llegara a su fin algún día pero ese fin no está en nuestras manos, Dios nos ha confiado la vida y NO disponemos de ella”. “El suicidio contradice la condición natural del ser humano a conservar y perpetuar su vida”. “Trastornos psíquicos graves como estar sumido en la angustia, el temor, el sufrimiento y/o la tortura pueden disminuir la responsabilidad del suicida, Dios es infinitamente misericordioso”.

Por muchas de las religiones esto es visto como un pecado (un crimen contra Dios y su máxima creación que es uno mismo); concepto que si bien en religiones como la católica es una razón de peso y un porque para no realizarlo para muchos de sus practicantes, para otros dentro de ella es solo uno de los falsos motivos que los mantiene atados a su desdichada vida (tienen miedo que al suicidarse su alma se condene eternamente). Por otro lado algunas culturas lo ven como una forma honorable de escapar de algunas situaciones humillantes, sin escapatoria o dolorosas en extremo; situaciones que creen que solo es posible se terminen con el fin de su existencia, aunque existe la tendencia a creer que la ofrenda de su propia vida es el único tributo capaz de reparar la falta cometida.

En algunas de las ideologías el concepto de suicidio es bastante cambiante pues supone la existencia de un ideal muy superior a la propia vida. En esta categoría se incluye una

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