Ensayo de Eres como una droga

Existen personas que son como los vicios, sabes que conocerlos te va a hacer daño e intentas no acercarte, pero cuando ya los conoces igual que una droga ya no lo puedes dejar, sabes a lo que te lleva, pero te aleja de tu miserable vida y te transporta a algo no real, pero si feliz. Al principio no es tanta la necesidad de salir o hablar con aquella persona, pero de a poco esto va cambiando, ya no era una vez a la semana, ahora es dos o tres veces a la semana que sales con aquella persona, tu vida de a poco empieza a girar en torno a la de ese ser humano.

Ya ha pasado un tiempo y tú necesitas más y más y más de aquella persona de echo decidiste irte de tu casa, fue horrible hubo discusiones, tu familia se puso triste, pero a ti poco te importo solo querías estar a su lado, tus amigos te hablan intentan hacerte entrar en razón, que la vida que aquella persona te quiere dar es falsa, pero nuevamente a ti no te importa y optas por alejarte de ellos también.

Pero llega un momento donde ya arruinaste tanto tu vida que deseas escapar de aquel ser, pero ya es tarde ¿pero porque? Simple, tus amigos, familia y conocidos ya no están, aquellas personas que te podían ayudar a salir desaparecieron o eso tú crees, pero la realidad es que no es que ellos te hayan dejado, al contrario, tú te alejaste de ellos. Aquellas personas ya tienen familia, hijos e incluso algunos ya no están en este mundo, pero todo ese tiempo y momentos importante tu no lo recuerdas o no estuviste, te lamentas de todo lo que hiciste y decides escapar empezar de cero.

Pasan unos años, tu creías que todo había terminado, encontraste empleo, conociste nuevas amistades e incluso ya estabas volviendo a relacionarte con tu familia y ya sales con otra persona. Ya no le echas la culpa a aquella persona de arruinar tu vida, en realidad te diste cuenta en todo este tiempo que ha transcurrido, que fuiste tú el que opto por ese camino, pero no importa no es importante quien fue el culpable, de echo decides llamar e invitarle un café y se ponen de acuerdo. Tú te arreglas para juntarte con aquella persona, ya han trascurrido mucho tiempo sin verse y esto te pone nervioso, llega el momento de ir donde se habían puesto de acuerdo en reunirse, llegas a la hora, algo que antes nunca hiciste, esperas una hora y no te importa sabes que no es puntual, pero ya a la segunda hora esperando sabes que ya no llegara, llegas a tu casa, no estas triste de echo no sientes nada, entras a tu casa y encuentras una carta que dice: no pude ir a verte, estoy iniciando una nueva vida , creo que tú me hacías mal y decidí no volver a verte. En ese momento tiras la carta enfadado, empiezas a romper cosas, no entiendes porque dice eso y por un segundo recuerdas tú en su casa con su familia almorzando y luego esperando en el auto para irte enojado y así muchas escenas que antes no recordabas como cuando le pegaste o cuando la dejaste tirada y te fuiste porque no hizo lo que querías y te pones a llorar te das cuenta que en realidad los dos eran como una droga para el otro y que nunca se dieron cuenta del daño que se hacían uno al otro.

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