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Fuego


Enviado por   •  1 de Agosto de 2014  •  Tesis  •  3.007 Palabras (13 Páginas)  •  173 Visitas

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Universo #1

1.0.0

-Blanco era lo que veían mis ojos, frío era a lo que mi cuerpo se había acostumbrado y la soledad era alegremente mi única compañera. Quien diría que de verdad terminaría solo y que me moriría en un ambiente tan tranquilo.-

1.0.1

-Los caminos eran largos, bueno… no eran caminos exactamente, mas bien tumultos bañados en nieve. Aún tengo ese pequeño resplandor en mi cabeza. Un sujeto cubierto en una gabardina negra, sombrero y un pasamontañas en la cabeza. En ese entonces éramos mas; para ser un poco mas especifico , éramos siete.-

1.0.2

-“Semana de los soldados terribles” Noviembre 7 de 1996. Mi esposa, Saturno, hace menos de 24 horas había dado a luz a mi primer y único hijo, Mikha. El grupo de Demolición Anti Whols Noctis, A.K.A “D.A.W.N” se preparaba para la marcha anual. Al principio Saturno fue dada de baja por maternidad, algo que ella rechazo con la actitud mas seca y fría de todas. Lo lamentaría mas adelante.-

1.0.3

-Los Whols Noctis eran una raza de mamíferos súper desarrollados, pertenecientes a la familia canina, exactamente a los lobos o científicamente mejor conocidos como “Canis lupus” Por alguna extraña mutación genética, producida por la constante irradiación de Selene y Kristall , los satélites principales de nuestro planeta. La característica que mas resalta en ellos, es su aspecto humanoide y el pelaje que variaba de colores en sus brazos, rostros, y espalda. Esta nueva amenaza era muy conocida en nuestro planeta debido a la insaciable sed que tenían. Sus músculos, agilidad, resistencia y intelecto eran exageradamente desarrollados; el uso constante de estos hacia que el liquido almacenado en sus cuerpos se evaporara, dejándolos terriblemente débiles. A causa de esto, los hijos de Gea nos vimos obligados a entrar en una despiadada guerra con los Whols. El gran océano de sangre es el nombre clave de la misma.-

1.0.4

-Estábamos a media marcha cuando cayo la noche sobre nosotros, eso era muy mala señal. Resulta que la noche es el tope de la fuerza de los Whols. ¿No te preguntaste el porqué del “Noctis” en su nombre? -

1.0.5

-Mi presentimiento se hizo realidad. Whols en el área. El ataque fue muy presentido, estábamos preparados. Terry, un pequeño aspirante a guardia de la noche, fue el primero en avistar a los Whols. Venían del este, muy raro de ellos, las tierras del este no poseían fuente de hidratación alguna. Es un vasto desierto, el hogar de los Corvis, una raza ancestral de aves parlantes. ¿Sera una alianza?-

1.0.6

-El acero chocaba en donde quiera que pusiéramos el ojo. Los bosques se tiñeron de la sangre de ambos bandos. Saturno era la mejor tiradora que nuestras filas conocían. Donde ponía el ojo había sangre. Sus flechas inundaban el cielo oscuro y nublado, algo que pronto cesaría. Neptuno era mi mejor teniente y estratega. Siendo mi mejor teniente, era el mejor con las dagas y otros cuchillos; se movía entre los arboles como ningún otro. En un abrir y cerrar de ojos, ya había acabado con 4 de ellos, era mi orgullo. Me pude dar cuenta de algo, los Whols comenzaban a debilitarse, era el momento para atacar.-

1.0.7

-Tomé mi mandoble y con fuerza corte la cabeza de los Whols cercanos. Divise en la lejanía un tipo de Whols muy extraño, utilizaba pieles blancas y llevaba un conjunto de arco y cimitarra. Sin duda alguna, el era la mente detrás de este ataque. Saturno defendía mi retaguardia mientras yo me abría paso, cortando salvajemente entre las filas de Whols. Estábamos cara a cara, un hijo de Gea contra un Whols. Enemigos de sangre. Nuestro acero no titubeo, una vez se tocaron, sabían que este encuentro estaba predestinado. Me mantuve a la ofensiva y amague cada vez que tuve la oportunidad, pero su agilidad era increíble. No era un Whols común, era algo mas….Debido a un mal movimiento, el peso de mi mandoble me llevo al suelo, algo que mi enemigo aprovecho vilmente. Estaba preparado para morir, había vivido una buena vida. Para mi sorpresa, Terry salto de entre la maleza y en un abrir y cerrar de ojos, la criatura le decapito. Cuanto hubiera dado por qué ese hubiera sido yo y no él.

Aprovechando su distracción y el sacrificio de Terry, tome mi mandoble y le di un corte cruzado en el rostro a la criatura, dejándolo tuerto. En un arranque de ira, la criatura se levanto y con la adrenalina que emanaba su cuerpo, tomó su cimitarra y preparo un ataque directo hacía mi. Ya no había nadie que me rescatase.

Su cimitarra cayo al suelo, vapor a grandes temperaturas emanaba de su rostro. Sus gritos de dolor inundaron el campo de batalla, di la orden para retirarnos y volver al puesto de control a las afueras del bosque. Adolorido y sorprendido por nuestra inminente retirada, el tuerto dio una extraña señal. Más Whols salieron de túneles ocultos debajo del campo de batalla, esto siempre fue una trampa, una trampa que ni Neptuno ni yo, pudimos ver. Los Whols se abalanzaron sobre mis hombres. Vi en primera fila, como mi amada era degollada por las frías garras de aquel maldito tuerto. Neptuno lucho hasta el final, minutos antes de ser mutilado grito “Honor y gloria para los hijos de Gea” El tuerto tomó el arco de mi esposa y humillándome a mi y a mi familia, me atravesó con una de sus flechas bañada en sangre del Whols que había decapito al principio de la batalla. No recuerdo mas de esa noche, solo caer y caer…-

1.0.8

-Ya llevaba dos lunas caminando; mis pies estaban desgastados y un sabañón había destrozado mis labios. Mi mandoble se quebró en siete fragmentos a causa de la caída, aun me pregunto el porqué de mi supervivencia. Seguí caminando a paso lento y cojo, no podía ver nada, una tormenta de nieva me sorprendió cuando menos lo esperaba; al no ser un hombre del norte el clima me sorprendería cada vez que cambiara. La herida que la flecha había causado, ya comenzaba a molestarme; extrañas líneas negras y quebradizas se formaban alrededor de la herida, como si de una infección se tratase. Mi saliva se seco alrededor de mi boca, mis ojos ya no producían lagrimas. Estaba al borde de la desesperación, pero la vi. Vi la esperanza en el horizonte, llamándome como si de mi esposa se tratase, como si estuviese en casa una vez más. Tome aliento, mire el camino venidero; la llama de la voluntad se había encendido una vez mas en mi, “SOY UN HIJO DE GEA” grite con todas mis fuerzas. Corrí hacía el norte de donde me localizaba

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