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Los científicos suelen reconocer sus errores cuando se les demuestra que están equivocados


Enviado por   •  10 de Octubre de 2015  •  Apuntes  •  5.587 Palabras (23 Páginas)  •  122 Visitas

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Diciembre de 2013

EJERCICIOS DE ORTOGRAFÍA

Literatura mexicana e iberoamericana

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EJERCICIO  1

Los científicos suelen reconocer sus errores cuando se les demuestra que están equivocados. Además, cambian de parecer y nunca se les vuelve a oír sostener la opinión anterior. No consigo recordar la última vez que un político hizo lo mismo.

Carl Sagan

EJERCICIO  2

Normalmente, se busca la causa de lo que nos sucede en el exterior. Sin embargo, a medida que la persona evoluciona, se vuelve más reflexiva y empieza a darse cuenta de que, en realidad, la respuesta a los conflictos que vive se encuentra en su interior.

Paz Torrabadella

EJERCICIO  3

Gustan quienes se sienten bien. Y sentirte bien en tu piel es una tarea personal e intransferible, que tiene que ver con si te escuchas, si has aprendido a notar tus sensaciones, a recrearte en la vida, a ser consciente de lo que habita entre tu pecho y espalda, a sentir de verdad que estás vivo, que lates aquí y ahora.

Paz Torrabadella

EJERCICIO    4

El éxito es un pésimo maestro, pues hace que las personas inteligentes se crean inmunes al fracaso. Y tampoco es buen guía con respecto al futuro: lo que hoy parece el plan de negocios perfecto o la tecnología más avanzada, en un abrir y cerrar de ojos puede volverse tan obsoleto como el tocacintas de ocho pistas y el televisor de bulbos.

Bill Gates

EJERCICIO    5

Proyectándose hacia el norte sobre el Golfo de México, se encuentra la península de Yucatán, el sitio donde, desde el siglo IV hasta el XVI de la era cristiana, floreció la más brillante civilización del Nuevo Mundo. Esta área, húmeda y tropical en su mayor extensión, contrasta con los climas en que se desarrolló nuestra civilización.

Sylvanus G. Morley, La civilización

maya. México, FCE, 1982, p. 17.

EJERCICIO    6

Goza de este día porque es la vida. La misma vida de la vida. En su breve curso estarán todas las realidades y verdades de la existencia: la dicha del crecimiento, el esplendor de la creación, la gloria del poder.

        Porque ayer es sólo un sueño y mañana, sólo una visión. Pero el hoy, bien vivido, hace del ayer un sueño de felicidad y de cada mañana, una visión de esperanza.

Antiguo texto en sánscrito

EJERCICIO 7

Según la leyenda, los aztecas o mexicas vinieron de Aztlán –que no ha sido del todo localizado, aunque parece que se encontraba en Michoacán. De ahí se dirigieron a Tollán (Tula), capital de los toltecas; viajaron hacia el valle de México y llegaron a Texcoco. Pertenecían a la gran familia nahuatlaca y fueron los últimos en marchar al sur.

Sylvanus G. Morley, La civilización maya. México, FCE, 1982, p. 18.

EJERCICIO  8

C. Darse cuenta, interpretar, dar un significado

Un aspecto del pensar se refiere al proceso de hacer un alto, por breve que sea, para darse cuenta, interpretar y dar significado. En realidad, puedes interpretar una conducta o un acontecimiento sin el proceso consciente de darte cuenta. Lo mismo vale para el hecho de dar un significado concreto a lo que ves o escuchas en un momento dado.

  • DARSE CUENTA:                        Te   tomas   tiempo   para   considerar   un

asunto. “¿Me conviene o no este trabajo?”

  • INTERPRETAR:                        Buscas   un  lugar   para   el  objeto  de  tu

                                         consideración.   “Este  trabajo  es una gran

                                        oportunidad”.

  • DAR UN SIGNIFICADO:                Sacas   una   conclusión.   “Aceptaré  este

trabajo”.

Luis Jorge González, Pensar. Un arte renovado por PNL. Monterrey, Publicaciones Monterrey, 1999. pp. 21-22.

EJERCICIO    9

El quehacer del hombre, en cuanto hombre, es la cultura. Tal es el oficio que nos transforma de animales en hombres. Pero aún podemos aspirar a más: a superar los límites humanos y convertirnos en dioses. ¿No lo sabías? Por algo los sacerdotes egipcios y los hombres conspicuos de Atenas solían repetirse para sí mismos: “Verdaderamente, tú eres un dios escondido”.

        (…) por ahora te invito a reflexionar sobre el drama de la cultura. Acércate y escucha: jamás de los jamases arribará la humanidad hasta los valores. Los luceros orientan en la noche al navegante, pero son inalcanzables. El hombre remará ansioso, volará por los senderos sin polvo del arte, del saber, de la moral: no obstante, la realización plena de la belleza, la verdad y el bien es absolutamente imposible. Son caminos infinitos, dice Kant; y el infinito no está al alcance de los seres finitos.

        El artista –así sea un Miguel Ángel– consigue apenas captar un destello minúsculo de la belleza perfecta. En la ciencia, cada vez que se encuentra la solución de un problema, esa misma solución plantea tres, cinco, diez nuevas aporías; así que mientras más se avanza en el saber, se tiene que reconocer más la finitud de lo que se ignora: nos percatamos de que nunca se alcanzará la verdad completa. Fenómeno semejante ocurre en la moral: quien acendra más su propósito de bondad, tanto más toma conciencia de sus defectos y miserias, del infinito que le falta para ser realmente bueno. En fin, el hombre culto avanza, camina sin tregua hacia aquellos luceros altísimos que son los valores, pero sin esperanza de alcanzarlos.

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