Monologo Facil y Sencillo

        Tomate el café con calma[pic 1][pic 2]

Bueno ¿qué? ¿por qué me miras con esa cara? Tarde o temprano tenía que decírtelo ¿no? No me puedo creer que esa cara de sorpresa sea sincera. Además, tengo la sensación de que tarde o temprano tenía que decírtelo ¿no? Y que tú sabes que lo iba a hacer. Bueno, ya está, ya lo he dicho y no sabes lo a gusto que me he quedado ¡en serio! A pesar de que me estés mirando con esa cara que tanto me desconcierta y que me hace sentir como un extraterrestre.

Si sigues moviendo así la cucharilla el café va a tener que tomarse una biodramina... bueno, como parece que no te has enterado voy a repetirlo ¿vale? Me siento tonto. Voy ¿eh? TE QUIERO. Tu cara de sorpresa aumenta, ¿estaré a punto de arrancarte una frase? ¿una palabra? ¿media? ¡qué sé yo!¡un suspiro...!

Voy de nuevo, ahora con dulzura: Te quiero... empiezas a sonrojarte, estás sudando, seguramente tus manos tiemblan, tus piernas flaquean ¿me equivoco? Tu corazón está la tiendo a mil por hora: pum-pum, pum-pum, deja la cucharilla de una vez, pum-pum, pum-pum...

¡Joder! La verdad es que esta es una de las situaciones a las que a uno le gustaría estar en cualquier otro sitio menos aquí ¡tierra, trágame! Anda, que si la tierra tuviera que tragarse a todos los repugnantes como yo esto se quedaría más desierto que la biblioteca de Descartes en domingo.

¡Vale! Está bien: te quiero, i love you, je´taime, Ti amo... ¿cómo era en alemán? Siempre se me olvida.... ¡mierda! He metido la pata ¿no? La he metido hasta el fondo... ¡joder. ¡Dios, Dios, Dios...! lo siento... soy la mezcla perfecta entre adolescencia y locura.

Por lo menos te he hecho sonreír, ¿no? Lo siento, lo siento mucho de verdad. Anda vámonos de aquí. Vamos al cine, o a dar un paseo o a mirar el atardecer y darnos cuenta de que el mundo está hecho para anoréxicas... pero sin prisa... tomate el café con calma...

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