Prudencia

Precipitación

Es cuando actuamos por el impulso, que regularmente pasa cuando estamos enojados o emocionados.

Falta de Consideración

Es cuando no nos tomamos la molestia de analizar las cosas, cuando nos detenemos a ni un momento a meditar en las consecuencias de nuestras decisiones, no consideramos si nuestras acciones pueden afectar negativamente a otras personas

Falta de constancia

No somos constantes porque regularmente vamos a actuar de una manera equivocada.

Falta de dominio de nuestras emociones

Esto puede llevarnos a prejuzgar o a juzgar a los demás de mala manera sin darnos cuenta

PRUDENCIA

La virtud de la prudencia trata de aprender a discernir, de tener criterios, antes de juzgar y decidir. Como se puede apreciar, hablamos de cosas que requieren de cierta madurez en las persona, por lo tanto habrá que tomarse un buen tiempo para lograr el desarrollo de esta virtud.

Aprender a reconocer la realidad

Esto supone aprender a ser objetivos, a ver lo que las cosas son en sí mismas, independientemente de nuestros gustos, nuestros intereses y nuestros caprichos.

Aprender a reconocer los criterios adecuados antes de juzgar o tomar decisiones.

Reconocer que pueden haber normas objetivas que en algún momento nos sirven de parámetros.

Aprender a tomar decisiones acertadas

No se trata de que porque a i me dijeron así y por eso yo digo eso o si para mi así esta bien, que debemos tomar en cuenta que si lo que hacemos o decimos esta bien no solo para nosotros si no también para los demás.

CONOCER LA REALIDAD

Distinguir entre los hechos y las opiniones

Separar lo objetivo de lo subjetivo.

En general tiéndenos a “interpretar” y no nos ajustamos a lo que realmente paso.

Distinguir entre lo importante y lo secundario

Saber priorizar las cosas para no dejar de ultimo las decisiones importantes

Seleccionar fuentes

Saber si la información que tengo es real, es verídica si quien me lo conto es alguien en quien puedo confiar

Relacionar causa y efecto

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