Reflexión Andar Con La Ciudad

Andar en la Ciudad

La ciudad, forma parte de la identidad de cada individuo, se defiende, se honora, se cuida, y se lleva en boca cuando se viaja, destacando sus ventajas y desventajas que de alguna manera la representan. Esta tendrá un significante y símbolos convencionales, sin embargo, cada ciudadano irá creando propios juicios de su ciudad de origen o pasajera.

Las perspectivas o juicios de cada persona, serán distintos a la de la multitud. De esta manera se formará un apego personal entre ciudad y habitante. Estas diferencias de ideologías no afectaran del todo al desarrollo ciudadano, pues al contrario se llegará a un objetivo representativo de la ciudad, se formara la identidad social pero también como habitantes se desarrollara una personal. Una ciudad va adquiriendo fuerza cuando tiene murales y edificios que la representen, pues de esta manera se creará un significado fuerte.

No siempre la ciudad será vista como una máxima exponente de equilibrio, en ocasiones solo se percibe como espacio para habitar. Dejando atrás la trascendía de una ciudad, omitiendo las necesidades de ese espacio, pero utilizándola para satisfacer las necesidades del contexto social, formando así habitantes egoístas y distantes de lo que llega a ofrecer la vegetación, cultura y sobre todo oportunidades para avanzar tanto profesionalmente como personal. Por otra parte, no todos venimos de la misma ciudad y esto da una ventaja de multiculturalidad.

No obstante, la ciudad solo es utilizada viéndola como una ventaja de superación, y olvidando las necesidades que se van generando. Poco a poco se va perdiendo ese vínculo con la ciudad, remitiendo la conexión con la, naturaleza que ofrece esa superación y esa base para iniciar una vida con proyectos. De este modo se va adquiriendo un rol de ciudadano, donde debe existir un acuerdo y se representa la responsabilidad que se debe crear con la ciudad.

Se puede concluir desde una perspectiva literal, de una imagen social, sin embargo, recaemos en una monotonía. Siempre se ha creído que la ciudad es parte de la vida de cada persona y así lo es sin embargo, somos nosotros quienes debemos agradecer y engrandecer la ciudad aportando beneficios y no quitándole su fuerza. Se dice que andar en la ciudad representa tus pasos recorridos sobre ella, la forma de desarrollo, y las experiencias que aportó. No obstante, existe una realidad; donde la ciudad es la principal protagonista pues somos nosotros quienes solo pasamos con toda una generación en una determinada ciudad, recayendo así en que la ciudad es quien anda con cada uno, pues nos brinda ese espacio de superación.

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