Aborto. Síndrome post-aborto

Introducción

A través de la historia el aborto ha sido frecuente materia de controversia por sus implicaciones éticas, morales y sociales. También ha sido prohibido o limitado en sociedades diversas. Pero los abortos continúan siendo comunes, incluso donde la presión social o la ley se oponen a ellos.

Cuando se piensa en la posibilidad del aborto, generalmente se toma muy a la ligera, sin medir las graves consecuencias que pueden afectar a otras personas aparte de la madre y del niño, que todos suponen que son los únicos afectados e involucrados en este gran problema, pero si miramos más a fondo, nos damos cuenta que en realidad afecta psicológicamente también a las personas que los rodean, porque éstas inconscientemente participan de esta terrible decisión.

El aborto daña física y psicológicamente a la mujer y hasta puede acarrearle la muerte. Estadísticamente hablando, se estima que el riesgo inmediato de dichas complicaciones es de un 10%, pero el de las complicaciones a largo plazo es entre el 20 y el 50%.

Además de las complicaciones físicas, las mujeres sufren emocional y espiritualmente de lo que ya se ha identificado como el “síndrome post-aborto”.

Entonces… ¿Tenerlo o no tenerlo?

Es una pregunta que a diario se hacen miles de mujeres que se enteran o sospechan sobre un embarazo no deseado. Es una pregunta que encierra no solo una respuesta, ya que el decidir si o no abortar, tendrá posteriormente muchas consecuencias.

Pero… ¿Es justo que una mujer decida no tener a un ser humano que aun no tiene la fuerza para defenderse? ¿La mujer tiene libertad para decidir sobre su cuerpo? O ¿La mujer que aborta comete un homicidio?

Preguntas que cada uno puede responderse según su perspectiva ética y moral.

Aborto por envenenamiento salino

Este método se utiliza a las 16 semanas de embarazo.

Se extrae el líquido amniótico, luego se introduce una aguja a través del abdomen de la madre, hasta la bolsa amniótica y se inyecta en su lugar una solución salina concentrada.

La idea es que el bebe ingiera esta solución que le producirá la muerte doce horas más tarde por envenenamiento, deshidratación, hemorragia de cerebro y de otros órganos.

Esta solución salina produce quemaduras graves en el cuerpo del bebé.

Aborto por succión

El aborto por succión se usa para embarazos con menos de 12 semanas. Primero, se abre la cerviz y se mete un tubo hueco que está conectado a una bomba de succión con una capacidad 29 veces mayor que el de una aspiradora casera de plástico hasta el útero. Luego se aspira para sacar el bebe.

La succión rompe al bebé en pedazos y lo absorbe, sacándolos del útero como si fuera una basura. Como la cabeza del bebé no puede pasar por el tubo, se introduce en la matriz un instrumento que comprime la cabecita y la extrae.

El aborto por succión puede causar: infección, trauma de cérvix, endometritis, perforación del útero, hemorragia, trauma renal, inflamación de la pelvis, etcétera.

Aborto por dilatación y curetaje

Este método se utiliza a las 23 semanas de embarazo, en este momento el bebé está muy grande para ser extraído por succión.

Es similar al método de succión pero en vez de despedazar al bebé por aspiración, se utiliza una cureta o cuchillo provisto de una cucharilla con punta afilada, con la cual se va cortando al bebé en pedazos, con el fin de facilitar su extracción por el cuello uterino.

Luego estos pedazos que han sido extraídos se deben juntar para asegurar que no han quedado restos en el útero de la madre.

Efectos del aborto

En la mayoría de los casos a la mujer no se le

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