Antes de dar respuesta a dicha pregunta, pienso que es necesario tener claro el concepto “Revolución Industrial”.

Antes de dar respuesta a dicha pregunta, pienso que es necesario tener claro el concepto “Revolución Industrial”.

Toda “Revolución Industrial” nace de una transformación  económica, social y tecnológica, marcando un punto de inflexión en la historia, modificando e influenciando todos los aspectos de la vida cotidiana de una u otra manera, y toda esta transformación  fue y será  posible gracias a  una sociedad abierta y preparada para los cambios.

Desde la  Primera Revolución Industrial ocurrida en Inglaterra a mediados del siglo XVIII, hasta esta Tercera Revolución, son muchos los años que han pasado y muchos son los avances que hemos vividos. Siendo imposible imaginarnos vivir sin medios de transportes, sin industrias, electricidad… y menos aún sin las Tecnologías de la Información y la Comunicación.

La Tercera Revolución Industrial, o también denominada Revolución Científico-Técnica o Revolución de la Inteligencia se inició  a mediados del siglo XX, con la invención de la primera computadora “ENIAC”.  Las áreas más representativas de ésta son la I+D de la energía nuclear, las telecomunicaciones y el espacio y Universo, así como las ciencias de la informática, la robótica y la biotecnología.

En esta Tercera Revolución Industrial juega un papel primordial las Tecnología de la Información y la Comunicación, tanto por su alcance económico como por su penetración social, considerándose el núcleo del desarrollo de la de las economías actuales.

Son muchos los expertos que consideran las TICs las protagonistas de la Tercera Revolución Industrial, siendo algunas de las razones expuestas las siguientes:

• Son tecnologías versátiles e innovadoras, es decir la podemos utilizar en cualquier sector económico.
• Son fáciles de usar, es decir no es necesario ser experto en la materia.
• Exhiben una disminución exponencial de los precios, tanto en sus soportes materiales como en sus entramados lógicos.
• Han experimentado un incremento en sus capacidades de tratamiento, transmisión y almacenamiento de la información.

Esta revolución se fundamenta en unos  cambios técnicos y productivos de primera magnitud vinculados con el uso en la producción de las TICs que se interrelacionan con unos cambios sociales y culturales. Ejemplo de ello tenemos la venta online que forma parte de nuestro día a día desde hace tiempo, y que cada vez va creciendo más, generando empleo vinculado a este negocio, siendo muchos los sectores beneficiarios de ello, como por ejemplo logística, marketing digital, transporte. Son muchas las empresas dedicadas al comercio electrónico y diseño de web  que ofrecen paquetes de comercio electrónicos destinados a la venta online de productos, facilitando a cualquier empresa (mayorista o minorista) poder vender sus productos en cualquier lugar del mundo, aumentando las ventas sin necesidad de disponer de conocimientos técnicos.

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