Aprendiendo A Soltar

Aprendiendo a soltar

Lo pasado ha huido, lo que esperas está ausente, pero el presente es tuyo.

Proverbio árabe

¿Acaso es difícil cambiar de celular? Y más en nuestros días con la variedad de diseños y tecnología que existen.

Y ni se diga de unos zapatos, pantalones, camisa o blusa que los desechamos por que no están a la moda o simplemente por que ya no nos gustan. ¿Es muy práctico hacer esto, no lo creen así?

¿Y por qué lo hacemos? Simplemente porque ya no los necesitamos, ya no nos gustan, salieron modelos nuevos, ya terminaron su ciclo de vida, ya no están a la moda, entre otras cosas.

Por lo tanto, es importante considerar que deberíamos hacer lo mismo con nuestros errores, problemas, pensamientos negativos, nuestros miedos, conflictos con nosotros mismos y terceras personas, … etc

Siempre es preciso saber cuándo se acaba una etapa de la vida.

NO insistir en permanecer en ella más allá del tiempo necesario, por que pierdes la alegría y el sentido del resto.

Cerrando círculos, cerrando puertas, cerrando capítulos, como quieras llamarlo. Lo importante es poder cerrarlos, y dejar ir momentos de la vida que se van clausurando.

¿Terminó tu trabajo?, ¿Se acabó tu relación?, ¿Ya no vives más en esa casa que tanto te gusta ?, ¿Debes irte de viaje?

Puedes pasarte mucho tiempo de tu presente "revolcándote" en los ¿por qué?, en regresar las escenas y tratar de entender por qué sucedió tal o cual hecho.

El desgaste va a ser infinito, porque en la vida, tú, yo, tu pareja, tu amigo, tus hijos, tus hermanos, todos y todas estamos encaminados en ir cerrando capítulos, ir dando vuelta a la hoja, a terminar con etapas, o con momentos de la vida y seguir adelante.

No podemos estar en el presente añorando el pasado.

Ni siquiera preguntándonos ¿por qué?. Lo que sucedió, sucedió, y hay que soltarlo, hay que desprenderse.

No podemos ser niños eternos, ni adolescentes tardíos, ni empleados de empresas inexistentes, ni tener vínculos con quien no quiere estar vinculado a nosotros.

¡Los hechos pasan y hay que dejarlos ir!

Por eso, a veces es tan importante destruir recuerdos, regalar presentes, cambiar de casa, romper papeles, tirar documentos, y regalar libros.

Los cambios externos pueden simbolizar procesos interiores de superación.

Dejar ir, soltar, desprenderse, decir adiós.

la vida nadie la tiene comprada, y hay que aprender a perder y a ganar.

El pasado ya pasó.

No esperes que te lo regresen, no esperes que te reconozcan, no esperes que alguna vez se den cuenta de quién eres tú…

Suelta el resentimiento. El encender "tu televisor personal" para darle y darle al asunto, lo único que consigue es dañarte lentamente, envenenarte y amargarte.

La vida está para ir adelante, nunca para atrás. Si andas por la vida dejando "puertas abiertas" por si acaso, nunca podrás desprenderte ni vivir lo de hoy con plenitud.

Si puedes enfrentarlos ya y ahora, ¡hazlo!, si no, déjalos ir, cierra capítulos.

Pero no por orgullo ni soberbia, sino, porque tú ya no encajas allí en ese lugar, en ese corazón, en esa habitación, en esa casa, en esa oficina, en ese oficio.

Tú ya no eres el mismo que fuiste hace dos días, hace tres meses, hace un año.

Por lo tanto, no hay nada a qué volver.

Recuerda que nada ni nadie es indispensable. Ni una persona, ni un lugar, ni un trabajo. Nada es vital para vivir porque cuando tú viniste a este mundo, llegaste

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