Banco De Los Trabajadores - Una Quiebra Anunciada

BANCO DE LOS TRABAJADORES – UNA QUIEBRA ANUNCIADA

El primero de Mayo de 1967, impulsado por la Organización de Estados Americanos, OEA, y con un capital semilla de 500 mil Lempiras aportados por el gobierno, el entonces Presidente de Honduras, Oswaldo López Arellano, fundó el Banco de los Trabajadores, con la intención de que los obreros tuvieran una fuente de financiamiento accesible a sus ingresos, con bajos intereses y con la oportunidad de ser socios con la sola aportación de un pequeño capital en concepto de ahorro.

En los siguientes 42 años, el Banco de los Trabajadores creció hasta convertirse en una de las instituciones financieras más sólidas del país, sin embargo, para agosto de 2010, Honduras se dio cuenta de que la bonanza y la solidez del banco eran falsas desde hacía mucho tiempo y que la mala administración que sufrió por tantos años, lo estaba llevando a la quiebra. Hoy, el banco de los trabajadores está a punto de desaparecer, a pesar de los 300 millones de Lempiras con que lo capitalizó la Federación de Cooperativas de Ahorro y Crédito de Honduras, FACACH.

Claman justicia (Noticia del 14 de diciembre del 2010)

Por su parte, el presidente de los ex socios del Banco de los Trabajadores, Pedro Pablo Varela, aseveró que el “Gobierno a través de la Comisión Nacional de Bancos y Seguros (CNBS) expropió nuestras acciones y esto es una injusticia, es como que nosotros los trabajadores de clase media no tuviéramos el derecho de tener una institución financiera”.

En ese sentido, aseguró que esperan que el Congreso Nacional “rectifique y luego modifique” el referido decreto, ya que según denunció, el mismo es inconstitucional debido a que “es una confiscación financiera”.

Varela aseguró que ya se han efectuado acciones legales en contra del decreto que permitió a la Federación de Cooperativas de Ahorro y Crédito de Honduras (Facach) tomar el 100 por ciento de la administración del Banco de los Trabajadores.

NO ESTABA EN CRISIS

Según informes en manos de los ex socios de la institución financiera creada hace más de 40 años, el Banco de los Trabajadores no atravesaba ninguna crisis cuando fue capitalizado por la Facach, por lo que cuestionaron la determinación de la CNBS, misma que calificaron como incorrecta y apresurada.

Varela aseguró que “desde hace 35 años el banco no muestra ninguna cifra de pérdida, incluso el año pasado ganó más de 43 millones de lempiras en utilidades y al 31 de octubre de este año se registraron 9. 5 millones en utilidades”.

CIFRA

377 millones de lempiras perdieron los 150 mil socios del Banco de los Trabajadores.

Se cree que la situación del Banco de los Trabajadores no sería tan grave si el gobierno hubiera desarrollado un plan de recuperación que incluyera la inyección de recursos frescos que garantizaran su operatividad, pero la intervención de la Comisión Nacional de Bancos y Seguros se limitó a destituir a la Junta Directiva que por años hizo y deshizo con los dineros de los ahorrantes, y lo peor de todo, es que ninguno de estos “genios de las finanzas” está preso, sencillamente, porque quebrar un banco no es un delito en Honduras. Recuerde que la Justicia jamás alcanzó a los que quebraron CAPITAL y BANCORP, solo para mencionarle dos ejemplos.

Con la

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