Guatemala

Por competitividad global se entienden todos aquellos factores que afectan el crecimiento económico de un país. En 2012, FUNDESA, realizó un listado de los países del mundo, ordenándolos según su nivel de competitividad. Fue así que se determinó que es el continente Europeo el que posee mayor cantidad de países competitivos en el mercado.

Al observar a los primeros países del ranking es posible notar similitudes en los mismos y por lo tanto considerar que dichos factores contribuyen al desarrollo del país y su población. La innovación del mercado, por ejemplo, parece ser uno de los indicadores claves para el desarrollo. A excepción de países como Alemania, la flexibilidad en el mercado y la facilidad para crear negocios innovadores, son grandes contribuyentes para mejorar la competitividad de un país.

Otro factor que parece influir en la competitividad de un país, es la inversión en la calidad educativa. Siendo esta una característica de todos los países en el top 10 de competitividad, podríamos decir que un país que invierte en la educación invierte en el desarrollo del país. No sólo invertir en la calidad educativa, sino proporcionar una alianza entre los centros académicos y el área empresarial, garantiza una mejora continua del mercado del país y la implementación de métodos innovadores y de mayor beneficio para sus habitantes.

Los avances tecnológicos parecen estar también ligados a la competitividad de un país. Los avances en infraestructura, maquinaria y en transporte, permiten al país ofrecer servicios más rápidos, seguros e innovadores, y por ello son un factor importante en la competitividad del mismo.

Las oportunidades laborales y la calidad de este sistema resultan un atractivo para los habitantes de un país y para los inversionistas extranjeros. Es por esto que son también indicadores importantes de la competitividad de un país.

Aunque el manejo de una economía desarrollada y sin deudas pareciera ser importante, países como Holanda y Japón, poseen deudas y déficit fiscales significativos y continúan estando en las primeras posiciones del ranking. Esto se debe a que el manejo de los recursos económicos del país se da de una forma eficiente, transparente y confiable, permitiendo a quienes laboran o desean invertir en el país, tener claridad en el manejo de sus recursos y predecir de forma más confiable los cambios en la economía del mismo.

China, por ejemplo, actualmente ocupa la posición 26 del ranking de competitividad, a pesar de tener una de las macroeconomías más fuertes y favorables del mundo y una de las deudas más bajas. Posee altos estándares de salud y de educación; tiene altos niveles de innovación y sofisticación en sus industrias; sin embargo se encuentra sumido en un sistema de gobierno corrupto, que ha llevado al país a crecer en índices de inseguridad y por lo tanto en costos por protección. Este factor ha desencadenado que China pierda ética laboral en sus empresas, limite la competencia al crear barreras comerciales y por ende posea un sector bancario inestable. Todos estos factores hacen que, aunque China posea una economía favorable, no se le considere como uno de los primeros países en el ranking por su competitividad.

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