HISTORIA DEL ATLETISMO
akme18 de Agosto de 2014
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Historia del Atletismo.
El atletismo no es solamente el deporte básico y el que da origen a otros muchos, sino también el primero que existió como tal en la antigua Grecia; se celebraban comúnmente, en efecto, competiciones atléticas en las festividades religiosas. Los juegos olímpicos se iniciaron en el 776 y se prolongaron hasta el 393 a.C. cuando fueron abolidos por el emperador romano Teodosio. La competición atlética más antigua que se conoce es la del “estadio”, una carrera en línea recta de unos 192m. En la historia del atletismo destaca un saltador de longitud llamado Chionis, porque en los juegos del año 656 a.C. obtuvo la marca más antigua que se conoce: 7'05m. Al declinar la civilización griega, el atletismo perdió su importancia; sin embargo, en el siglo XIX experimento un resurgimiento, ya definitivo, en Inglaterra, donde en 1866 se disputaron los primeros campeonatos nacionales. En EE.UU el atletismo tuvo una expansión paralela a la inglesa. El primer encuentro internacional se disputo en 1895, un año antes de la restauración de los juegos olímpicos, cuando el New York Athletic Club se enfrentó al London Athletic Club, pero hasta los juegos de Atenas en 1896, el atletismo no recibió el empuje necesario para convertirse en un deporte internacional. En 1913, 16 naciones fundaron en Berlín la Federación Internacional Atlética Amateur (IAFF). La primera asociación atlética femenina se constituyó en Francia en 1917, y la primera de carácter internacional, la FSFI, en 1921; el grupo fundador estaba integrado por Gran Bretaña, Francia, Checoslovaquia, Italia, España y EE.UU. El comité olímpico internacional no admitió la participación femenina en los juegos hasta la edición de 1928. Poco antes de la II guerra mundial se iniciaron importantes competiciones al margen de los juegos olímpicos: Los juegos del imperio Británico (Actualmente llamados juegos de La Commonwealth) en 1930, y los campeonatos de Europa en 1934. Pero fue después del conflicto cuando el atletismo conoció la mayor expansión de su historia. El aumento y la mejora de las comunicaciones, el interés y la intervención de los estados en su desarrollo y los progresos técnicos han influido decisivamente en este salto cualitativo. Las marcas mejoraron radicalmente y se superaban con facilidad aunque se han dado casos excepcionales como los 8'90m en salto de longitud conseguidos por el norteamericano Bob Beamon en 1968, que no fueron superados hasta 1991. La participación también ha ido aumentando a todos los niveles; a ello han contribuido la incorporación de piases que hasta la primera mitad del siglo XX eran desconocidos a nivel deportivo. Al margen de Europa, EE.UU, Australia y Nueva Zelanda, que prácticamente monopolizaron el atletismo hasta la II guerra mundial, han surgido numerosos atletas de clase mundial como los atletas cubanos Juantorena, Sotomayor y Quiroi, la jamaicana Ottey y el chino Jian-Hua, entre otros. Sin embargo, la mayor revolución se ha producido con la eclosión de una pleyade de atletas de países africanos que dominan las carreras de fondo y medio fondo, desde los 1500m hasta el maratón: marroquíes como Aouita, argelinos como Morceli y Bulmerka, etíopes como H. Gebreselasie tras las huellas del legendario Abebe Bikila, tanzanos, nigerianos y muy especialmente kenianos, se han instalado con asiduidad en el medallero de las competiciones. En los últimos años se han extremado las medidas para prevenir el doping, que había tomado carta de naturaleza entre la elite mundial de los atletas: el caso más espectacular fue la descalificación del canadiense Ben Johnson después de obtener la medalla de oro y el récord mundial de los 100m lisos en los juegos olímpicos de Seúl en 1988.
Pruebas de atletismo
CARRERAS
CARRERAS DE VELOCIDAD
Las más cortas son las de velocidad, que en pista cubierta se corren sobre distancias de 50 y 60 m. y al aire libre sobre 100, 200 y 400 m. En este tipo de carreras, el atleta se agacha en la línea de salida, y al sonido del disparo se lanza a la pista y corre a la máxima velocidad hacia la línea de meta, siendo fundamental una salida rápida. Los corredores alcanzan la tracción situando los pies sobre unos bloques especiales de metal o plástico llamados estribos, diseñados especialmente para sujetar al corredor y que están colocados justo detrás de la línea de salida.
Las características principales de un estilo eficiente para carreras de velocidad comprende una buena elevación de rodillas, movimientos libres de brazos y un ángulo de penetración del cuerpo de unos 25 grados.
CARRERAS DE MEDIOFONDO
Son aquellas que cubren entre 600 y 3000 m. Las más populares son las de 800m., 1.500 m. y 3.000 m.
Los competidores en carreras de media distancia deben regular su velocidad cuidadosamente para evitar quedarse exhaustos; algunos cambian de ritmo varias veces durante la prueba mientras que otros mantienen el mismo durante toda la prueba. La forma de correr más apropiada difiere de la utilizada en las carreras de velocidad. La acción de rodillas es mucho menos pronunciada, la zancada es más corta y el ángulo del cuerpo hacia delante es menos acusado.
CARRERAS DE FONDO
Las carreras por encima de 3.000 m. se consideran pruebas de fondo o de larga distancia. El estilo utilizado por los los atletas que practican esta modalidad evita cualquier exceso de movimientos; la acción de rodillas es ligera, los movimientos de los brazos se reducen al mínimo y las zancadas son más cortas que en los otros tipos de carreras.
Entre las carreras más agotadoras de fondo están las de campo a través, cross y las de maratón. A diferencia de otras carreras de larga distancia, que se corren sobre pistas de composición variada, las de campo a través se realizan sobre un terreno tosco y natural. Las carreras de maratón se corren normalmente sobre carreteras pavimentadas. Los corredores de ambas modalidades deben aprender a ascender colinas con zancadas cortas y eficientes y a descender con rapidez sin agitarse ni descontrolar el paso. Es esencial paso uniforme y mantenido.
VALLAS
Las pruebas de vallas son carreras de velocidad en las que los competidores deben superar una serie de diez barreras de madera y metal (o plástico y metal) llamadas vallas. Las carreras de vallas al aire libre más populares son los 110 m. vallas, que se corren con las denominadas vallas altas; los 400 m. vallas (con vallas intermedias) y los 200 m. con vallas bajas.
100 m. (femenino) 110 m. (masculino) femenino masculino
Número de vallas Diez vallas Diez vallas Diez vallas
Altura de los obstáculos 84 cm. 106 cm. 76 cm. 91 cm.
Distancia entre la salida y la primera valla 13 m. 13,72 m 45 m.
Distancia entre obstáculos 8,50 m 9,14 m. 35 m.
Distancia de la última valla a la llegada 15,50 m. 14,02 m. 40 m.
Una buena forma de saltar vallas consiste en saltar desde lejos y salvar las barreras suavemente sin romper el ritmo de zancada. La primera pierna que pasa la valla vuelve a la pista de una forma rápida; la otra pierna, mientras tanto, supera la valla casi en ángulo recto respecto al cuerpo. Gran velocidad de carrera, flexibilidad y una gran coordinación son los elementos más importantes para desarrollar a la perfección esta modalidad.
CARRERAS DE OBSTÁCULOS
La carrera de obstáculos es normalmente sobre una pista de 3.000 m. que contiene vallas, rías y otros obstáculos.
Número de vallas 35 obstáculos: 7 pasos de ría y 28 obstáculos
Altura de los obstáculos 91 cm.
Distancia entre la salida y la primera valla 270 m
Distancia entre obstáculos 78 m.
Distancia de la última valla a la llegada 67 m.
MARCHA
Las carreras de marcha se corren normalmente sobre distancias que oscilan entre 1.500 m. y 50 km. La regla principal de este tipo de carreras es que el talón del pie delantero debe permanecer en contacto con el suelo hasta que la puntera el pie de atrás deje de hacer contacto con el mismo. Está diseñada para evitar que corran los participantes.
RELEVOS
Las carreras de relevos son pruebas para equipos de cuatro componentes en las que un corredor recorre una distancia determinada, luego pasa al siguiente corredor un tubo rígido llamada testigo y así sucesivamente hasta que se completa la distancia de la carrera. El pase del testigo se debe realizar dentro de una zona determinada de 18 m. de largo. En las carreras de 400 y 800 m. relevos, el testigo el testigo pasa del corredor que lo entrega al que lo recibe cuando éste último ya ha comenzado a correr hacia delante, continuando el receptor la carrera. En carreras más largas, debido a la fatiga acumulada, el corredor que recibe el testigo muchas veces mira hacia atrás para recogerlo. En condiciones ideales, tanto el corredor que entrega el testigo como el que lo recibe, deben ir a la máxima velocidad y separados unos dos metros para hacer el cambio. En estas pruebas, los miembros de los equipos que intervienen corren por una zona de la pista; para completar cada relevo el corredor debe entrar en la llamada zona de traspaso, que permite al receptor del testigo iniciar su carrera.
SALTOS
ALTURA
El objetivo del salto de altura es pasar sobre una barra horizontal, sin derribarla, que se encuentra suspendida entre dos soportes verticales separados unos cuatro metros. El participante tiene derecho a tres intentos para superar cada altura. Para ejecutar el salto, los saltadores se aproximan a la barra casi de frente, se giran en el despegue, alcanzan la barra con la cabeza por delante, superándola casi de espaldas y caen
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