Informe Bases Martes original

El Síndrome de Asperger es un tipo de autismo. El autismo afecta la manera en la que una persona interpreta el idioma, se comunica y socializa. Este síndrome es el resultado de variados factores que afectan a una gran parte o la totalidad del funcionamiento cerebral. Dentro del síndrome del autismo está el espectro autista. Los niños están más expuestos que las niñas a sufrir de esto.

Esta enfermedad fue descubierta en el año 1944 por el medico austriaco Hans Asperger que se especializo en pediatría donde en una observación con niños de diferentes edades percibió que compartían una discapacidad, la dificultad para interactuar socialmente aunque mantenían sus niveles cognitivos normales.

50 años después de que Asperger publicara por primera vez sus consideraciones acerca del trastorno el reconocimiento del Asperger fue reconocido como un diagnóstico clínico en 1990.

Es un trastorno del desarrollo cerebral, es una discapacidad social que hace su aparición en la edad temprana y produce una alteración en el proceso de la información.

Algunos de los síntomas son falta del desarrollo de las amistades, mutismo selectivo, hipersensibilidad en sus sentidos, superdotados, no son empáticos, muy estructuralistas, pasan por diversas etapas, viven en su  mundo interior, son literales, no son expresivos, buen reconocimientos de patrones y defisis en las habilidades motoras.

Dentro de su entorno son muy cariñosos con su familia, se autorregulan, ellos no pueden cambiar, sino que su familia se debe adaptar a ellos. Cuando se trata de terapia es la familia la que debe cambiar y adaptarse, porque las personas que sufren de este síndrome no poseen la capacidad de adaptación.

También tenemos que tener en cuenta que dentro del asperger se percibe, en un grado mucho menor, el autismo. Lo que lo hace responsable de la mayoría de sus síntomas.

La causa del Síndrome de Asperger parece ser la disfunción de varios circuitos cerebrales, y las zonas afectadas son la amígdala, los circuitos frontoestriados y temporales y el cerebelo, estructuras que están involucradas en el desarrollo de la relación social.

Los estudios genéticos se están centrando en valorar la heterogeneidad en los estudios de gen único que no explican el síndrome de asperger en el 90% de los casos.

Para comenzar un tratamiento psicológico es necesario ir más allá de la conducta y captar lo que es el mundo para el sujeto en cuestión, los tratamientos cognitivos y conductuales pueden mejorar su relación en tres ámbitos, y estos son; educativo, social y laboral.

Claramente dentro de estos no hay tipos específicos del asperger, pero viendo la variable cantidad de síntomas, hay muchos tipos de reacciones dentro del mismo síndrome.

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