Ketamina

La ketamina al igual que muchas de las sustancias tienen una función farmacéutica sin embargo su uso de desvía hacia un uso recreativo que lamentablemente trae consecuencias negativas para la salud integral de un individuo. A partir de las lecturas de esta unidad podemos tomar en cuenta que, la ketamina es útil entre otras cosas para el control del dolor, ahora bien lo comparamos con el uso recreativo considero que la intención de los usuarios es también de alguna forma aliviar un dolor, cubrir una falta. Al darse cuenta de que la sustancia aminora la dolencia que el individuo presenta es muy probable que se repita el consumo. Otra situación que predispone el consumo recreativo es el hecho de que los adolescentes por sus propias condiciones de desarrollo se encuentran en la edad de “reto” en la que muchas veces no tienen percepción de riesgo, por el contrario muchas veces inician el consumo por curiosidad o bien por permanecer en determinado grupo.

Describa dos conductas de resistencia de la joven.

•Mencione las técnicas (al menos tres) que utiliza el profesional para manejar la resistencia de la joven, entre paréntesis indique el minuto (aproximado) del vídeo en que se realiza cada técnica.

•Proponga dos preguntas abiertas que usted le haría a la chica del vídeo para manejar su resistencia.

•Conclusiones.

•Reflexión personal.

•Referencias.

En el texto de William R. Miller y Stephen Rollnick[1] se hace una afirmación importante: “la motivación para el cambio no reside simplemente dentro de la piel del paciente, sino que surge de un contexto interpersonal”[2].

Si la persona convive, socializa, comparte, etc., en un contexto donde está normalizado el consumo de drogas y donde le atribuyen a esas drogas ciertos beneficios o ventajas, entonces, su motivación va a estar dirigida a mantener ese consumo.

Si, en otro escenario, la persona participa de un contexto donde se identifican las consecuencias adversas del consumo de drogas, es probable que, como mínimo, la persona vaya albergando una discrepancia.

Si además, la persona encuentra un espacio donde se le escucha reflexivamente, se le trata con respeto, halla empatía y una relación horizontal con la persona del terapeuta, es que se podría involucrar en un proceso terapéutico.

Y ya en terapia podría, dicha persona, trabajar la ambivalencia que le es inherente y la resistencia que suele presentarse en un proceso terapéutico.

De acuerdo con el artículo de investigación que realizaron Gantiva y Flórez[3], haciendo uso de técnicas como “devolución de la resistencia”, “reformulación” o el “acuerdo con un giro” el terapeuta podría conseguir hacer un manejo adecuado de la resistencia

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