Liderazgo De Barack Obama

El fenómeno Obama responde al tema del liderazgo desde la psicología social. Definimos al líder como un sujeto que se convierte en el foco o centro del grupo. Lo que se destaca del líder respecto del grupo es la atención y el requerimiento e influencia para la ideología del resto. El líder también es capaz de inculcar sus deseos e inducir obediencia. El gran grupo lo acepta como gurú de su futuro y garante de la línea de acción posterior. La esterilidad espiritual de Occidente supone un facilitador para el acogimiento sin condiciones de un superhombre.

Las características principales del líder son tres:

1. La habilidad en la tarea

2. Aceptación social

3. Iniciar muchas situaciones por unidad de tiempo.

La elección de Obama por parte del grupo de poder correspondiente ha sabido capturar estos factores en la persona de este carismático hombre. Muestra una habilidad innata y aprendida, a proporciones similares, para abordar tareas de estado. La aceptación social viene de la primera característica, pero sobre todo de la falta de ídolos y de ideas apasionadas que tiene el mundo actual. La última característica viene de la prolongada crisis económica: iniciar varias tareas por unidad de tiempo. Obama, más que realizar tareas en espacios temporales, ha propuesto múltiples teorías y discursos creíbles. Tiene ese pensamiento “naif” de hiperactividad exitosa en la resolución múltiple del conflicto financiero.

Otro punto de interés y análisis son las situaciones influyentes que han determinado al Presidente Obama:

A.- El tamaño del grupo. A mayor tamaño del grupo, mayor necesidad de líder. Los dos millones de personas que asistieron en directo a su investidura, avalan un grupo bien definido que sigue a un pastor emergente

B).- El tipo de tarea dispuesta para el líder. Las tareas que exigen comunicación y coordinación requieren una fortaleza particular del líder. El mundo de la información, la imagen y la tecnología, tiene una única exigencia: imagen y comunicación. Ya no es la fuerza, ni la contundencia de sus hechos.

C).- Estilos de líder y situaciones (Fiedler). Obama responde al estilo directivo enfocado a las emociones. Es un líder emisor de conductas socio-emocionales. Ofrecen apoyo y muestran solidaridad. Suelen gozar de muchas simpatías dentro del grupo.

D).- La estructura de la tarea puede ser estructurada o no estructurada. La primera tranquiliza y fidelista el aplauso y simpatía del grupo. Un éxito garantizado de este presidente ha sido su propuesta teórica y verbal de un futuro posible y cohesionado.

E).- El poder del líder puede ser fuerte o débil. A mayor fortaleza, mayor fidelidad y mejor relación con el grupo. El mundo civilizado se ha fragmentado tanto, apareciendo interminable de ideas, filosofías y alternativas, que necesitaba un punto de unión externalizada en un ser semejante.

Por último, el perfil de personalidad que mejor garantiza la perpetuidad del líder es el siguiente:

• Popularidad. Sobradamente preparada, cocinada y pagada por el poder mediático.

• Inteligencia. El Sr. Presidente ha mostrado un rasgo de inteligencia evidente a través de su fluidez verbal, sintaxis precisa y leguaje muy apropiado, con agilidad sobrada en sus pensamientos bien organizados y secuenciados. Domina el tiempo, el orden y la secuencia. Controla atención, concentración precisa y buena memoria de trabajo.

• Habilidades de comunicación. Basta aplicar el punto anterior.

• Deseo de destacar. Toda su actuación tenía un solo objetivo ser el único. Sus estudiadas poses, su presentación solidaria, sus “desnudos” de torso. Cualquier acción ha sido planificada como única, novedosa y genial.

• Originalidad. El color de piel lo han convertido, desde él, hasta el grupo

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