MANDELA: EN NOMBRE DE LA LIBERTAD

MANDELA: EN NOMBRE DE LA LIBERTAD

1. ¿En qué radica el liderazgo?

Teniendo en cuenta las características que definieron el carácter del liderazgo que representó Mandela, se puede decir que, su peculiar estilo de liderazgo se inclinó y fue fortalecido por una innata fuerza interior, y un profundo sentido de autoconfianza. Además de mantenerse como líder correcto en pro de la democracia y los derechos humanos, brindó pautas de cómo lidiar con conflictos y diferencias con los otros. Entre ellas, como buen líder hace uso de una naturaleza incluyente  y participativa, con la intención de que la toma de decisiones se llevará a cabo democráticamente por un amplio grupo de personas; resalta también, la escucha de todas las partes argumentativas, para luego debatir y analizar; actuar como líder en ciertas ocasiones de forma individual, transmitir una buena imagen en apertura con el mundo, y por último, saber reconocer cuando se debe terminar el proceso como líder dentro de determinado grupo poblacional.

2. ¿Cómo representa su liderazgo?

Nelson Mandela se plantea y establece desde una visión y perspectiva de líder democrático, ya que, prioriza la participación del equipo, permite además que el grupo decida la política a seguir y toma las diferentes decisiones a partir de lo que se opine en el grupo o equipo de personas. Además, desde su papel de líder potencia la división del equipo y valora las distintas opiniones que se generan en los espacios. Es importante mencionar que está atento a las necesidades de sus colaboradores, ofrecen orientación y soporte a los mismos. Entre sus características principales, se encuentra el fomento del trabajo en equipo reconociendo el valor de la idea y pensamiento de los otros.

3. ¿De qué forma la opresión le permitió generar un proceso administrativo adecuado?

Mandela, muestra mejor que nadie cómo el odio y la descalificación rotunda del otro son, con mucha frecuencia, una actitud encadenada a los subordinados, a su propia suerte. Donde él, siendo un político centró su objetivo en rescatar al pueblo de la opresión que vivía. Pero entendió que siendo amable y receptivo con sus verdugos no sólo hacia lo correcto, sino también lo útil.

A esta conclusión fue llegando poco a poco en la cárcel, a través de la meditación y la lectura durante décadas de entreno. Se dio cuenta que no hay que buscar la sumisión de los enemigos (Eso reproduce el conflicto) sino su consentimiento.

Presentado por:

Juan Camilo Ovalle Cortes ID: 664901

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