PARO AGRARIO

PARO AGRARIO

Ante tantas injusticias y desigualdades Colombia se movilizó, estudiantes, mineros, camioneros y por supuesto campesinos entre otros se unieron para dar fuerza a este movimiento que se ha hecho presente en más de 25 departamentos, en oposición al gobierno y a su falta de compromiso y legitimidad.

Es evidente la participación y apoyo de la gente que a pesar de las cortinas y diferentes noticias que tergiversan la realidad vemos, entendemos y vivimos lo que sucede, porque el campesinado es y han sido la base y raíz de grandes logros en este país.

La acumulación de problemas que trae el agro y la brecha de pobreza existente entre el campo y la ciudad hacen denotar la gran inestabilidad estatal e institucional que existe, pero lo que hay que hacer realmente es liderar acciones concretas, y fijar un objetivo, centrarse en el problema y la posible solución, demostrar que no somos marionetas, que somos seres pensantes y racionales y que por naturaleza vive en comunidad, salirse de los límites y represiones que nos ubican dentro de la ignorancia, aun se sigue luchando a pesar de los débiles efectos del estado y la terrible y marginal corrupción que se vive actualmente.

Colombia un país único pero con baja credibilidad de progreso, requiere orden y compromiso con la industria y su mano de obra nacional, lastimosamente somos un país demasiado dependiente del Estado, resignados ante la esperanza y la supervivencia, esperando la llegada de un súper héroe justiciero que nos arreglara la vida, pero sabemos que no es así, que el estado subestima el poder del pueblo, y juega con los recursos que diariamente producimos para alcanzar un poco de estabilidad y tranquilidad en el país, pero si no pueden con la base de la economía que es la agronomía ¿cómo pondremos en sus manos los otros aspectos relevantes como la salud y la educación? Necesitamos una política cambiaria seria, comprometida con la industria y no con la deuda pública.

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