CHE CHOROKÖKÖ

SONRISA DE MA…

LA SONRISA DE UNA MUJER

LLENA DE LUZ MI MUY PROFUNDO SER,

ESENCIA QUE NO DEJO DE RECORDAR,

LA HISTORIA DE ESA DAMA,

SEÑORA, QUE CON UNA SONRISA CALMABA

HASTA LA AGONIA DE MI IGNORANCIA,

BARBARIE DE UNA EPOCA,

DONDE NO TENIA DOMINIO DE LA VIDA Y EL PLACER,

GOZO QUE SOLO SIENTE, AQUEL HOMBRE O NIÑO,

CUANDO TIENE A UNA MUJER.

AÑORANZA DE TENERLA EN MIS BRAZOS Y ATAÑER ESA SONRISA

SONRISA QUE SOLO ELLA LO SABE CONCEBIR,

CADA DÍA MIRAR CON EL RABILLO DEL OJO, EL CIELO Y LAS NUBES,

LA IMPOTENCIA DE NO PODER DIBUJAR AQUELLA SONRISA

EN LA COSMOLOGÍA CHAQUEÑA.

ME ALEJA MÁS Y MÁS DE MI DESEO DE VOLVERLA   A   VER

MARTHA ES SU NOMBRE, LA MUJER QUE ME DIO LA VIDA,

SU SONRISA FUE EL ALIMENTO DE EXISTENCIA,

VIDA QUE CUELGA DE UNA SOGA DE ESTA REALIDAD.

REALIDAD QUE MIS AMORES NO CONOCEN

POR MI EGOISMO DE NO RELATAR LAS HISTORIAS DE MAMA,

GUARDADAS EN MI INCONSCIENTE Y LAS FOTOS DE AQUEL ÁLBUN,

LUGARES QUE VISITABA, AMIGAS, COMPADRES DE ESTA HERMOSA TIERRA PROMETIDA,

POR ESO EXTRAÑO LA SONRISA DE MI MADRE ANHELADA.

                                     AUTOR: JOSUE FIDEL RADA MONTERO

“AYAJUMIN”

La corriente del río Pilcomayo

se asemeja a tu cabello ondulado

Ayajumin, tus divinos astros resaltan

Tu rostro moreno de suaves mejillas.

Ayajumin eres la soberana de mi

Corazón, el cual es amplio como la

Anchura del rio Pilcomayo, que

Desaparece en el horizonte, así te amo.

Chinita linda, como la flor del tuscal

pechos definidos como el Aguaragüe

que me vuelven locos, cuando quiero gritar

a los coyuyos el deseo de este fuego, amor.

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