Biocombustibles

Biocombustibles.

Los biocombustibles son considerados como una alternativa verde a los combustibles fósiles que contribuirá a disminuir la concentración de dióxido de carbono en la atmósfera y con ello frenar el calentamiento global.

Los biocombustibles son elaborados en base a materiales producidos por los seres vivos, son alcoholes, éteres, ésteres, etc.

Los biocombustibles son una fuente renovable de energía, todos los países tienen la capacidad producir biomasa vegetal o animal.

Los 2 biocombustibles más usados en el mundo son el etanol y el biodiesel, usados en los motores de automóviles y camiones.

El etanol es un alcohol generalmente producido de la caña de azúcar y el Biodiesel se produce a partir de aceites vegetales o animales, actualmente el Etanol representa el 90% de los biocombustibles producidos, y el Biodiesel el 10% restante.

El cambio de las viejas fuentes de energía a estas nuevas desencadenaría numerosos cambios económicos y sociales.

Algunos factores que apoyan la vialidad de este proyecto son los ingresos económicos derivados de cultivar materias primas y producir biocombustibles.

La investigación realizada por el instituto Smithsoniano de investigaciones tropicales, arrojan datos que indican que la emisión de CO2 por biocombustibles puede ser hasta 30% menor que sus similares derivados del petróleo.

La impulsión del desarrollo de Biocombustibles o las llamadas energías verdes solo sería un proyecto viable si logramos desarrollar las herramientas adecuadas para su obtención y manejo, ya que actualmente su uso no representa una mejora ambiental ni social.

Si lográramos poder dejar de depender de los combustibles fósiles, tendríamos una gran mejoría en aéreas de nuestras vidas, tales como la calidad de aire que respiramos, el mejoramiento del medio que nos rodea, etc.

Deberíamos enfocarnos actualmente a la producción de biocombustibles de segunda generación, ya que esto no representa un impacto violento en el medio, sino más bien es una manera de reutilizar los desechos de biomasa vegetal.

Por lo que ahora sin la tecnología preparada debemos conformarnos a buscar la producción de energía limpia tal como la energía eólica y solar.

Así mismo señalan que la relación entre la energía invertida y la obtenida del Biodiesel es positiva, a razón de 1-3.2 unidades de energía, en el etanol obtenido a raíz de la fermentación de la azúcar el rendimiento energético es de 1.9 unidades.

Sin embargo otros autores no dan cuentas tan positivas ellos afirman que los cultivos de los que se extraen Biocombustibles presentan balances energéticos negativos: para producirlos se necesita más energía de la que se obtiene; al convertir bosques, pastizales en zonas de cultivo para obtener biomasa se libera a la atmósfera casi 420 veces más CO2 de que se ahorro al usar los biocombustibles.

Los balances energéticos del biodiesel y del bioetanol dependen en gran medida de la materia prima que se elija, la eficiencia tecnológica, el proceso utilizado y el lugar donde se producen los cultivos.

Por si fuera poco, la combustión del etanol produce como desecho formaldehído y aceltadehído, sustancias cancerígenas.

La crisis alimentaria y el aumento de los precios de los alimentos básicos, tales como el maíz, se debe a la alta demanda de tierras y productos para la realización de Biocombustibles.

La alternativa parece ser entonces no producir biocombustibles a partir de alimentos si no con desechos de industrias como la forestal, la agrícola y la papelera llamados de segunda generación.

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