Chikungunya

INTRODUCCIÒN

A nivel internacional se puede apreciar la gravedad y las consecuencias del virus Chikungunya; en los países con clima tropical las personas son más vulnerables a padecer esta enfermedad, pero el riesgo para las mujeres embarazadas, el feto y el recién nacido no es bien conocido por la población.

En Venezuela el virus del Chikungunya se encuentra por todo el país afectando a gran parte de la población, sin hacer excepciones, niños, jóvenes, adultos mayores, mujeres embarazadas, etcétera. Dos etapas del embarazo son particularmente vulnerables: el primer y último trimestre de gestación.

Específicamente el presente informe apunta a los riesgos, que representa el contagio del virus del Chikungunya, en la población de mujeres embarazadas, y en consecuencia para el feto y al recién nacido si el embarazo llega a término. Advierte la Periodista de Globovisión, Cerrada, J. (2014), quien consulto a dos especialistas, que:

Las complicaciones en embarazadas podrían ser severas. El director del Instituto de Medicina Tropical de la UCV, Jaime Torres, explicó que cuando las mujeres presentan un cuadro febril durante las primeras semanas de gestación corren el riesgo de padecer un aborto natural o espontáneo. La fiebre es uno de los síntomas de este virus, por lo que existen probabilidades de que esto ocurra. Sin embargo, recomendó a las embarazas a mantenerse en control médico en caso de algunas de estas manifestaciones.

La mujer recién parida también puede transmitir el virus Chikungunya al bebé, en caso de que ella esté contagiada con el virus. En relación con lo anterior, Acevedo, C. (2014), aclara que la Organización Panamericana de la Salud (OPS) afirma que “la transmisión del virus en esta situación se debe a que las madres con la enfermedad durante el período perinatal (esto es cuatro días antes del parto y un día después) pueden transmitir la fiebre a los recién nacidos.”

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El presente informe es una herramienta de la asignatura Técnicas de Documentación, en pro del conocimiento de los estudiantes, la mejora de las condiciones de salud de las personas que hacen vida en la Universidad Arturo Michelena, y en definitiva representa un aporte en el marco de prevención y riesgos del virus Chikungunya, y de referencia, como base útil, susceptible de ser mejorada, para otras investigaciones. En el mismo se describe la enfermedad producida por el virus Chikungunya y los riesgos que conlleva su padecimiento durante el el embarazo.

PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA

La globalización, entendida como la internacionalización, en diversas áreas, a nivel mundial, ha provocado que las enfermedades se propaguen independientemente del deseo de instituciones y gobiernos regionales, nacionales e internacionales, y en consecuencia, el cuidado de la salud y la prevención de enfermedades, como el virus Chikungunya, se han convertido en una difícil tarea. Adicionalmente, existe la necesidad de invertir esfuerzo y dinero para prevención e información, que dichos organismos dedican en otras actividades. Según Peralta R. (2014):

A nivel mundial el virus Chikungunya se expuso como una epidemia que ocurrió en una isla francesa, en el año 2005, cuando se reportaron 33 casos de recién nacidos de madres que tenían, en el momento del parto la enfermedad, y los bebés resultaron positivos. Se les hizo un seguimiento por 2 años donde se constató que el 51% presentó retrasos en el desarrollo neurológico, 57 % con alteraciones en cuanto a la coordinación y lenguaje, 36% en sociabilidad y 27% de en postura y movimientos, inclusive 2 de ellos presentaron encefalopatía neonatal.

Aunque no es frecuente que ocurran alteraciones en el recién nacido, de una madre que tiene Chikungunya, es importante que las mujeres embarazadas tengan pautas y medidas preventivas a seguir, sobre todo cuando están muy cerca del parto, para evitar que el bebé se contagie, porque no hay vacuna, y para prevenirlo es necesario retrasar parto hasta por una semana. Y aunque en Venezuela se lee y escucha mucho sobre dicho virus, la información oficial sobre los riesgos, en particular durante el embarazo, ha sido deficiente. Acevedo, C. (2014), afirma que:

Desde que surgió el brote de Chikungunya en el país, las autoridades precisaron que dentro de la población vulnerable a esta enfermedad están las embarazas. Sin embargo, no se ha precisado de manera detallada cuáles son los riesgos de que una mujer embarazada contraiga la Chikungunya, enfermedad que de acuerdo a la Organización Panamericana de la Salud (OPS), es una infección arboviral, transmitida por la picadura de mosquitos Aedes infectados. Según esta entidad internacional, un factor que determina que una mujer sea referida por la enfermedad, es que se encuentre en estado de gestación. Explica que la fiebre Chikungunya parece tener una repercusión directa sobre el embarazo, con notificación de abortos espontáneos y esporádicos.

En Venezuela el problema la escasez de los medicamentos, para combatir los síntomas de la enfermedad, dificulta su control, lo recomendado por especialistas en el Estado Carabobo, donde se han presentado numerosos casos, según Peralta, R. (2014) es “mantenerse en un reposo inmediato, hidratación y seguir las indicaciones; pero para la mujer embarazada y el recién nacido existen riesgos adicionales”. Cerrada, J. (2014), explica que “la cesárea no evita la transmisión del virus al recién nacido, quien con Chikungunya presenta síntomas como fiebre, inapetencia, dolor, edema distal, manifestaciones en piel, crisis convulsivas, meningoencefalitis y anormalidades ecocardiográficas.”

Por lo anteriormente expuesto las embarazadas con Chikungunya son un grupo de riesgo, que deben ser informadas sobre prevención y atendidas por su gineco-obstetra, y en procura de proteger al feto tratar de postergar el trabajo de parto; además el recién nacido pasa a ser un paciente con serios riesgos de salud.

Objetivos de la Investigación

Objetivo General.

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