EL GRAN COLISIONADOR DE HADRONES
Edgar Martínez RíosResumen3 de Marzo de 2020
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Instituto Politécnico Nacional
Escuela Superior de Ingeniería Química e Industrias Extractivas
Ingeniería Química Industrial
Departamento de Formación Básica
Historia y Filosofía de la Ciencia
Introducción:
El Gran Colisionador de Hadrones
Alumno: Martínez Ríos Edgar Armando
Profesor: Álvarez Gómez Miguel Ángel
Grupo: 1IV24
EL GRAN COLISIONADOR DE HADRONES
¿Recrear las condiciones del Big Bang? ¡Objetivo ambicioso! Pero, vamos, ¿cómo sería posible? Bueno, en los últimos años la comunidad científica ha destinado la mayor parte de sus recursos a los experimentos en el Gran Colisionador de Hadrones del CERN (Organización Europea para la Investigación Nuclear).
El Gran Colisionador de Hadrones, también conocido como LHC por su sigla en inglés, es una enorme obra de ingeniería diseñada especialmente para realizar experimentos con partículas subatómicas. Este gigante, también llamado “la máquina del Big Bang” está ubicado a más de 100 metros de profundidad en el centro de la CERN, el mayor laboratorio de física de partículas en el mundo.
Concretamente lo que los científicos desean hacer en el Colisionador es recrear el instante inmediatamente posterior al Big Bang para comprender la composición de la materia y la interacción entre partículas muy pequeñas. La CERN autor del El Bosón de Higgs que es la partícula que le da masa a las otras partículas descubriendo de este modo como se compone la materia y así se justifica el origen de todas las cosas que existen en el Universo. En otras palabras, así se explicaría “la obra de Dios”. Este descubrimiento es la pieza del rompecabezas que buscaban los científicos para validar el paradigma del Modelo Estándar de la física de partículas. El Modelo Estándar se podría entender como “un manual de instrucciones para la creación del universo”.
En marzo de 2014 lo volvieron a poner en marcha; en junio terminó de hacer pruebas de calibración y desde julio está trabajando en su máxima potencia, 14TeV, el doble de la energía utilizada para encontrar el Bosón de Higgs.
Una vez ya descubierto el Bosón de Higgs, los científicos del CERN navegan por un océano de posibilidades sin una brújula, escarbando cada vez más hondo en las entrañas de la realidad. Un nuevo campo de la física completamente inexplorado que esperan conocer con ayuda del colisionador, que es al mismo tiempo, telescopio y microscopio de la realidad teniendo como reto el descubrimiento de fenómenos como la materia oscura, las extradimensiones, los agujeros negros y la súper simetría.
Por otro lado, hay científicos en contra de este artefacto debido a que creen que al crear mini hoyos negros las energías generadas para la creación de estos podían provocar que fueran inestables tragándose la tierra en un lapso de 50 meses y provocar un equilibrio cuántico débil que se podría romper creando “un colapso del tiempo y el espacio” (esto es mencionado por Stephen Hawking en su libro “Starmus”) , además que al convertirse en puertas interdimensiones confirmarían la existencia de múltiples dimensiones de las que se creían posibles.
La realidad es a veces mucho más increíble que la ficción. En cualquier momento unos de los experimentos del CERN podrían cambiar para siempre la manera en que entendemos o experimentamos la realidad y abren todo un panorama donde el debate entre si su labor en pro del avance científico o tiene otro fin se tratara de encontrar alguna respuesta a través de esta investigación tomando en cuenta las teorías “conspirativas” y su desarrollo a lo largo de los años desde su creación.
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