Embriologia

Desarrollo de sistema embrionario: Después de la gastrulación se inicia la diferenciación del

embrión. En las tres hojas blastodermicas se forman evaginaciones, invaginaciones, espesamientos, divisiones y otros cambios que determinan la formación de los órganos y sistemas. El sistema nervioso se inicia dolorosamente en un par de pliegues neurales. Entre estos se juntan para formar el tubo (conducto) neural, cuyo extremo anterior es más ancho y dará lugar al encéfalo. A cada lado, entre el tubo neural y el ectodermo, la línea de las células forma las crestas neurales, que producirán las raíces dorsales o sensitivas de los nervios espinales que salen de la medula. Las raíces motoras aparecen después ventralmente en la medula. El encéfalo primitivo está formado por tres vesículas: el cerebro anterior, medio y posterior. El cerebro anterior produce los hemisferios cerebrales y el diencefalo; y el cerebro posterior derivan el cerebelo y el bulbo raquídeo. A cada lado del cerebro posterior derivan el cerebelo y el bulbo raquídeo. A cada lado del cerebro anterior se forma una vesícula óptica redondeada; cuando éstas tocan al ectodermo, al lado de la región cefálica, lo estimulan para que forme una gruesa vesícula, que posteriormente se convierte en el cristalino. Entre tanto, la superficie externa de las vesículas ópticas se hace cóncava por invaginación y forma la retina.

El endodermo de la cavidad primitiva del arquéntero se convierte en el revestimiento del tubo digestivo. Delante, en la futura faringe, se unen tres invaginaciones de cada lado del tubo digestivo con tres invaginaciones procedentes de los lados del cuello; éstas se abren para formar las hendiduras branquiales. Una evaginación ventral impar, situada detrás de la faringe forma el esbozo del hígado, que dará lugar al hígado y al conducto biliar. En la región de la cabeza, en posición ventral, se forma una invaginación del ectodermo (estomodeo), y otra similar (proctodeo) en el extremo posterior. Más avanzado el desarrollo embrionario, éstos se perforan, alcanzando el endodermo del tubo digestivo, el estomodeo se convierte en la cavidad bucal y el proctodeo en el conducto anal, ambos tapizados por el ectodermo. Durante la vida larvaria se desarrolla hacia atrás una evaginación de la faringe, con dos lóbulos, de la cual se forma la laringe, la tráquea y los pulmones.

Durante la gastrulación, se forma el mesodermo, entre el ectodermo y el endodermo. En el centro de su porción dorsal se pliega y forma un cordón macizo de células, el notocordio, situado entre el tubo nervioso y el intestino primitivo para servir de eje de sostén del cuerpo.

El mesodermo de cada lado del notocordio pronto crece hacia abajo, formando una lámina curva entre el ectodermo y el endodermo, uniéndose ventralmente debajo de la masa vitelina. La delgada parte inferior (hipómero) de cada placa se divide en dos estratos. El estrato externo se adhiere al ectodermo, formando el peritoneo parietal, y el estrato interno rodea al intestino (y posteriormente a otros órganos) para constituir el peritoneo visceral (y el musculo liso del intestino), el espacio que queda entre estas capas es la cavidad del cuerpo o celoma. La parte superior del mesodermo (epímero) de cada lado del tubo nervioso y del notordio forma una serie longitudinal de bloques segmentarios o somitos. Cada somito se diferencia en tres partes: una parte externa delgada (dermatoma) se convierte en la dermis de la piel, una parte interna gruesa (miotoma) origina después a los músculos voluntarios, y muy cerca del notordio, unas células esparcidas (esclerotomo) crecen alrededor del tubo nervioso y del notordio para formar las vertebras (esqueleto axial), primero cartilaginosas pero luego reemplazadas por hueso. Entre las placas ventrales y los somitos, una tercera porción (mesomero) es precursora del sistema excretor y parte del sistema reproductor.

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