LAS SUPERBACTERIAS REALIDAD MUNDIAL

LAS SUPERBACTERIAS

REALIDAD MUNDIAL

Se dice, que las ciencias de la salud son interdisciplinarias por el hecho de entrelazar o combinar varias ciencias para el estudio de un mismo caso clínico desconocido; o para profundizar el estudio de una forma más especializada. La bacteriología, es una rama de la medicina que estudia las bacterias y los efectos que causan sobre los organismos. También se encarga de clasificar a estos microorganismos de varias formas, en el campo de la medicina, se dividen en aquellos que son peligrosos para los seres vivos y los que no, se realiza un estudio en el que se establecen cuáles son los peligros, y curas ante una posible infección. Este ensayo tiene como finalidad demostrar porqué las bacterias resistentes a los antibióticos son una amenaza mundial.

En primer lugar, en Colombia  la preocupación por las llamadas “superbacterias” cobró vigencia a propósito de la revelación que  una de estas  habría sido la causante de la muerte del cantautor Joe Arroyo en una clínica privada de Barranquilla. Según las estadísticas, más del 50% de las bacterias que se presentan en los hospitales de la capital del Atlántico son resistentes a la meticilina, un antibiótico más efectivo que reemplazó a la penicilina. Esto quiere decir, en otros términos, que existen gérmenes  que han acabado con la vida de seres humanos aunque hayan sido tratados por personal capacitado.

Es también importante aclarar, que según un estudio realizado por la revista científica “Salud Uninorte”, La automedicación es una de las principales causas, puesto que al tomar antibióticos cuando no hace falta las bacterias crean resistencia a los mismos. Por lo tanto, ante una infección causada por las bacterias que han creado resistencia, los antibióticos de uso común ya no son eficaces. El uso excesivo de antibióticos de amplio espectro, tales como las cefalosporinas de segunda y tercera generación, acelera en gran medida el desarrollo de resistencia a la meticilina.

En conclusión, el problema es más grave de lo que se está pensando, no solo por las infecciones contraídas en los hospitales sino por la falta de mecanismos de investigación que permitan identificar los tipos de resistencias de cada bacteria.  Necesitamos actuar a varios temas: Primero, racionalizar y restringir aún más el uso de antibióticos; segundo, mejorar las condiciones de higiene en los hospitales. Y por último, necesitamos nuevos antibióticos para tratar estas bacterias porque no van a desaparecer por sí solas.

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