Las Feromonas

Las feromonas son sustancias químicas secretadas por los seres vivos con el fin de provocar comportamientos específicos en otros individuos de la misma u otra especie. Muchas especies de plantas y animales utilizan diferentes aromas químicos como medio de comunicación, tanto para atraerse o rechazarse sexualmente.

Los científicos sugieren que estas pequeñas moléculas llamadas feromonas afectan a la sexualidad humana, hay un órgano olfativo en concreto que recibe las señales de las feromonas y las envía al cerebro está localizado en las profundidades de la nariz humana, consiste en una formación redonda. Las feromonas producen una respuesta eléctrica que es registrada por un electrodo nasal. Se considera que las feromonas son recibidas por el órgano vomeronasal (OVN) que envía proyecciones al bulbo olfatorio accesorio. La atrofia del OVN fue considerada por un tiempo de la existencia de feromonas en seres humanos, otras versiones en 2006 indicaron que también el epitelio olfatorio puede funcionar como receptor de feromonas, y que éste y el OVN pueden diferir en el tipo de sustancias.

Las reacciones fisiológicas de feromonas en los humanos son en las axilas, contienen glándulas especiales de gran tamaño, que además muestran diferencias entre hombres y mujeres. El sudor secretado por estas glándulas sirve de nutriente para ciertos tipos de bacterias, que producen variedad de olores. Existen ciertas regiones específicas donde parece tener cantidades importantes de estas glándulas que son los pezones y las mejillas. En las mujeres, se cree que las secreciones de los pezones pueden ser detectadas por los lactantes, como ocurre en otras especies de animales. La saliva también es un lugar para la búsqueda de feromonas, pues muchas otras especies las poseen en ella; así como los fluidos vaginales, que contienen ciertas sustancias de efecto feromonal en otros animales.

Los humanos también utilizamos el olor corporal para atraer a otras personas, en la Universidad de Newcastle al norte de Inglaterra los científicos estudiaron a mujeres para saber cuál de esas mujeres es más compatible biológicamente con un hombre en concreto y por cuál de sus olores corporales se sentirá más atraída. Resulta ser que las parejas biológicas más perfectas tienen sistemas inmunológicos muy diferentes, así sus futuros hijos podrán combatir posibles enfermedades. Se les realizaron análisis de sangre a seis mujeres para descubrir su inmunidad biológica, y si este coincide con la inmunidad de los hombres, las mujeres no se sentirán atraídas por ellos, y si este no coincide con la inmunidad de los hombres, si se sentirán atraídas. En este mismo experimento se pidió a las mujeres dormir con la misma ropa dos noches seguidas para mantener sus olores corporales, colocaron la ropa en una bolsa y la metieron al congelador, después las metieron en jarras herméticamente cerradas. De estas seis prendas se las dieron

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